Luis Bárcenas, ex tesorero del Partido Popular, en prisión desde hace más de cuatro años, ha decidido tirar de la manta sin la falsa prudencia que exhibía antes de que su mujer, Rosalía Iglesias, ingresara en la cárcel. Cansado de tanta ingratitud, vuelca ahora datos significativos de la contabilidad irregular del PP. Y dice que solo es el principio.

En un intento de conseguir que su esposa vea reducido el tiempo de privación de libertad, ha puesto en evidencia al anterior presidente del Gobierno, Mariano Rajoy Brey, que siempre negó conocer las trampas fiscales de su partido, el PP, del que también era presidente cuando se empezaron a descubrir los chanchullos.

A pocos días del juicio que empieza este lunes, por una de las piezas del caso Gürtel denominada “Papeles de Bárcenas”, ha puesto por escrito lo que llevaba callado durante todo este tiempo. Es decir, la Caja B era real como la vida misma y Mariano Rajoy Brey estaba al cabo de la calle de todo esto, asegura Bárcenas, quien sostiene haberle entregado la documentación al efecto, que el expresidente destruyó inmediatamente.  

En 2008, publiqué en formato de cómic humorístico el libro “La España de Rajoy” (grup editorial 62). En ese tono, y montado a partir de un supuesto diálogo entre el protagonista y el ex presidente José Luis Rodríguez Zapatero, se trasluce el perfil político de quien ahora es el blanco de las iras de Luís Bárcenas.

En boca de Rajoy Brey se pueden leer frases como éstas para justificar su forma de hacer política: Siempre procuré ser un buen chico, me lo tragaba todo para salvar España y José María Aznar me apretaba demasiado.

En varias de las viñetas, Rajoy figura como oportunista, aficionado a nadar y guardar la ropa y a quedar bien con unos y con otros, por lo que pueda pasar. A día de hoy, cuando faltan cuatro días para que comience el juicio, el ex presidente del Gobierno ha optado por ignorar las declaraciones de quien fue su hombre de confianza.

Este lunes, Bárcenas se sentará en el banquillo para aclarar los aspectos de toda esta historia sucia. En lo que él dice conocer, han cobrado sueldos extra una serie de dirigentes populares por ese sistema de dinero no declarado y procedente, dice, de dádivas de empresas a cambio de adjudicaciones de obras.

En concreto, el pago de parte de las obras de la sede central del PP, en la calle Génova de Madrid, con ese dinero no aclarado y la compra de acciones, también en opaco, de Libertad Digital, el periódico online de Federico Jiménez Losantos. Y ello, según Bárcenas, “… por razón de que este medio resultaba afín a las ideas del Partido Popular y especialmente a las tesis de la autoría de ETA en los atentados del 11-M que tuvieron lugar unos meses antes de la suscripción de esas acciones”. Mira por dónde.