Una vez más, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha arrastrado a Génova a su corriente discursiva. Con matices, pero el presidente del Partido Popular ha virado su argumentario sobre los condenados de EH Bildu hacia la deriva marcada por Sol. Alberto Núñez Feijóo, tras celebrar sin tapujos la renuncia de los etarras, les ha reclamado un compromiso por escrito para que no se quede en un “engaño más”. Al mismo tiempo, el candidato al Ayuntamiento de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha calcado la estrategia de la baronesa al dudar de la palabra de los condenados.

“No me parece que podamos fiarnos. ¿Quién puede creer a unos asesinos que no han mostrado arrepentimiento?”. La autoría de estas declaraciones podría estar bien definida y señalar en exclusiva a Isabel Díaz Ayuso. Sin embargo, no es la presidenta de la Comunidad de Madrid la que firma estas palabras, sino el alcalde de la capital y candidato a la reelección, José Luis Martínez-Almeida. Tanto en las redes sociales como en su visita al plató de Al Rojo Vivo, el regidor madrileño ha apostado por el argumentario de la jefa del Ejecutivo regional frente al de un edulcorado Feijóo, a pesar de que el líder del PP se ha visto obligado a endurecer sus postulados.

De la mano de Ayuso

En su intervención en Al Rojo Vivo, el alcalde de Madrid ha escenificado unos posicionamientos cercanos a los planteados por Isabel Díaz Ayuso. “¿Quién puede creer a personas que tienen delitos de sangre, que no han dado muestras de ningún tipo de arrepentimiento?”, se ha preguntado Almeida, al tiempo que recordaba que hay otros 37 candidatos en las listas de Bildu que “no han pegado el tiro”, pero que ayudaron a los que “asesinaron a personas” e instauraron el “chantaje y la extorsión” en Euskadi. “Para mi no tienen mejores cualidades personales”, ha insistido el primer edil de la capital.

Almeida entiende que la renuncia es una buena noticia, pero matiza que sería mejor que no se les incluyera en las listas electorales, que “no cogieran el acta” y que pedro Sánchez “decidiera que no tiene nada que ver con Bildu y que, por tanto, no pactará el Gobierno de Navarra”. En este punto, Antonio García Ferreras le recordó que los abertzales no apoyaron la investidura del jefe del Ejecutivo ni otras medidas de calado como la reforma laboral. “Pero sí aprobaron la Ley de Memoria Democrática que nos quieren imponer a todos”, ha apostillado el candidato del PP al Ayuntamiento de Madrid.

Sus críticas al Ejecutivo por sus pactos con Bildu han dado pie a las declaraciones que en tiempos promulgaron otros miembros del PP como el actual portavoz de la campaña de los conservadores, Borja Sémper. En el año 2013, el entonces presidente de la sucursal popular en Guipúzcoa aseguró en una entrevista que el futuro de Euskadi se tenía que construir con la formación abertzale. Almeida cree que esta postura expresa que “si Bildu era un partido legal iba a formar parte de las instituciones”, por lo que defiende que no es lo mismo pactar con Bildu la “gobernabilidad de España” que acordar cuestiones relativas a “zonas verdes” o la colocación de “farolas” en según qué municipios. “Nadie pensará que Rita Maestre es una aliada de Javier Ortega Smith, pero eso no quita para que puedan votar lo mismo”, ha justificado el regidor.

A raíz de la inclusión previa a la renuncia de los condenados, la presidenta de la Comunidad de Madrid planteó la ilegalización de EH Bildu. “Lo dejado muy claro: si no cumplen la Ley de Partidos, entonces, lógicamente, debería ser ilegalizado”, ha sentenciado el alcalde de Madrid, quien ha percutido en la necesidad de reformar la normativa para evitar una “provocación” similar.

Ayuso contagia a Feijóo

Ya lo intentó durante el fin de semana, sin una respuesta clara por parte de la cúpula de Génova y sin éxito. Ayuso buscó condicionar el discurso del Partido Popular con la ilegalización de Bildu. Propuesta rechazada por Feijóo, que se limitó a apelar a Sánchez para activar a la Fiscalía y a la Abogacía del Estado para actuar mediante la Ley de Partidos y la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG), con el objetivo de impedir la inclusión de “asesinos” en las listas de EH Bildu.

No obstante, y a pesar del optimismo matutino exhibido por Feijóo ante la renuncia de los condenados, el líder del PP se ha visto obligado a endurecer levemente su argumentario. Los matices de Sol han asomado por el discurso del presidente conservador horas después de la disonancia reflejada en las redes sociales. Contrasta la intervención del jefe de la oposición en un acto del partido en Alcorcón con la postura de celebración sin ambages después de que trascendiera el documento de los candidatos de Bildu.

El tono triunfalista de Feijóo no ha desaparecido, pero se ha teñido de un cierto escepticismo made in Ayuso. El jefe de los conservadores ha modulado sus tesis para evitar el choque con la presidenta regional. Por ello, ha emplazado a los siete candidatos de Bildu que comparezcan ante la Junta Electoral Central en las próximas horas y, “por escrito”, presenten su renuncia a las actas para que “eso no sea un engaño más”.

Flanqueado por un distinguido miembro de la guardia pretoriana de Ayuso y a la postre secretario general del PP de Madrid, Alfonso Serrano; y el candidato conservador a la Alcaldía de Alcorcón, Antonio González Terol, Feijóo ha insistido en que el paso atrás de Bildu supone un triunfo para el conjunto de los españoles, pero no porque Sánchez se atreviera a pedírselo. “Es evidente que todos los que llevábamos denunciando esta ignominia hemos sido útiles, mientras Sánchez ha vuelto a callar”, ha apostillado el líder de la oposición mientras recordaba que aún luchan para que los otros 37 condenados por Bildu “desaparezcan” de sus listas.