La presencia femenina en las instituciones y altos cargos políticos sigue siendo hoy en día una reivindicación que ocupa todos los espacios de la sociedad. Y es que según el Ministerio de Política Territorial y Función Pública, en España hay actualmente 1.768 alcaldesas frente a 6.363 alcaldes, lo que supone solamente un 21,74% de mujeres en los altos puestos municipales.

Con todo, estos datos reflejan una mejoría en relación con los registros anteriores. En la primera legislatura democrática municipal de 1979, esta cifra era de solo un 1% de alcaldesas frente a una inmensa mayoría de hombres. Por eso, y con motivo del 40º aniversario de la Federación Estatal de Municipios y Provincias, este periódico se ha puesto en contacto con diversas alcaldías dirigidas por mujeres para analizar desde su punto de vista esta situación y los pasos avanzados.

Hemos venido para quedarnos

Así, preguntada sobre cuál es el motivo de esta todavía baja presencia femenina en las instituciones, María Eugenia Rufino, alcaldesa de Salobreña, en Granada, pone el foco en el papel de los partidos políticos. ''No todos tenemos la obligatoriedad de tener listas cremallera y en el mundo local te encuentras con configuraciones de bastantes más hombres que mujeres. No podemos obligar a elegir a alcaldesas pero sí que las listas sean paritarias'', asegura a ElPlural.com.

''La línea también depende de la carga ideológica. Hay partidos que no se plantean esa paridad y no implantan estas listas, que son fundamentales para garantizar un mínimo de paridad en los Ayuntamientos y hace que tengamos una igualdad de oportunidades a la hora de venir a la política'', apunta la también presidenta de la Comisión de Igualdad de la FEMP.

''Ahora ya la alcaldesa no es la mujer del alcalde, pero aún queda recorrido'', defiende la socialista, al tiempo que lamenta ser ''poco más de la mitad en el mundo'' mientras aún tienen ''muchos techos de cristal que todavía cuestan de romper''.

En la misma línea va Susana Pérez Quislant, alcaldesa de Pozuelo de Alarcón, en Madrid, quien además ha pedido hechos y no palabras. ''Es importante la apuesta que hacen los partidos por la presencia de las mujeres, y no se puede quedar solo en los papeles, sino que tiene que ser efectiva'', reclama. ''La primera mujer presidenta del congreso fue del PP, también las últimas presidentas de la Comunidad de Madrid y de la Asamblea, así como las alcaldesas de Pozuelo'', recuerda la dirigente popular.

La importancia del municipalismo

La presencia femenina en los Ayuntamientos cada vez es más visible. Si hablamos de las concejalías, la evolución es más notable, y es que las las mujeres han pasado de ser el 3% en 1979 a superar el 40% en la actualidad.

Preguntadas por si esto se debe al municipalismo, ambas coinciden. ''El cambio empieza en el municipalismo necesariamente. Desde lo local se puede hacer lo global, al revés no va a ser real'', apunta la de Salobreña. ''Claro que tenemos que tener soportes legales, si no hay planes de igualdad en las empresas privadas y una perspectiva de género no se avanza en la igualdad'', reivindica.

Por su parte, Quislant asegura que ''ha empezado ya, hace mucho tiempo''. ''Es verdad que es un cambio muy lento pero las mujeres hemos venido para quedarnos, y en puestos de responsabilidad'', defiende. Por eso asegura que sí que ve la posibilidad de que una mujer sea presidenta del Gobierno, también de Europa, dice. ''No creo que nadie vaya a dar un paso atrás'', insiste la de Pozuelo de Alarcón.

''Cuando en el Congreso Federal del PSOE vi a gobernantes como la de Finlandia pensé, ¿Cuándo tendremos en España una mujer presidenta? Hay mujeres muy capaces en este país y dar ese paso no sé de qué depende ni en manos de quien está pero no lo veo lejos. No hay un hándicap para que una mujer no llegue a ser presidenta del Gobierno de España'', afirma por su parte Rufino.

Según la ONU Women, en la actualidad, solo un 6% de países tienen una jefa del Estado o presidenta del Gobierno. Así, de un total de 193 países, únicamente 22 mujeres ocupan una de esas dos funciones, dos más que en 2020. Destaca que las naciones de Europa del norte son las regiones del mundo donde más ocupan altos cargos.

Las mujeres en los altos cargos

Cada vez son más las voces autorizadas que piden y exigen que aumente el número de mujeres en los puestos de representación más elevados, donde todavía hay mucha desigualdad debido a los techos de cristal. Más allá de las discrepancias políticas, ambas alcaldesas muestran estar al unísono en este tema. 

''Somos la mitad y tenemos que estar en los puestos de responsabilidad en igualdad de condiciones que los hombres. Además estamos perfectamente preparadas para tomar decisiones y para poder llevar una vida en la que el trabajo y nuestras metas profesionales se puedan cumplir'', afirma la dirigente de Pozuelo.

Rufino señala que ''es una cuestión de justicia social''. ''Estamos hablando de un derecho que nos corresponde no por una cuota, sino porque somos ciudadanas del mundo y debemos de tener los mismos derechos y oportunidades. Me parece justo y un desperdicio de capital humano que a estas alturas no podemos permitirnos'', sentencia.