Malos tiempos para Albert Rivera y Ciudadanos. El proyecto liberal, que durante 2017 y parte de 2018 ganó músculo, padece ahora una hipotrofia muy marcada. Las encuestas cada vez sitúan más bajos a los naranjas. Tanto es así que, según un sondeo de DYM para El Independiente, la formación de centro perdería un poco menos de la mitad de sus votantes.

Si los comicios del 28 de abril resultaron históricos para Ciudadanos, pese a advertir que no apoyarían a Sánchez, los resultados del presumible 10N serían catastróficos y un retroceso que frena un costoso avance. Según esta encuesta, en las cuartas elecciones en cuatro años, Ciudadanos se quedaría con 13,3%, frente al 15,9% de las pasadas elecciones.

De hecho, esta estrategia seguida desde el recuento final de votos hasta estas fechas, le puede costar hasta 22 diputados. Pasaría de un récord histórico de escaños hasta la horquilla más baja, entre 35 y 30 asientos. Según el sondeo de El Independiente, esta sangría de votos desembocaría en el PP principalmente, aunque también tomaría la senda hasta la calle Ferraz, pero en menor medida.

La encuesta, elaborada entre el 9 y el 12 de septiembre, el partido naranja es el único que ve mermada su tasa de fidelidad, pues tan sólo el 46% de los que se decantaron por Ciudadanos en las urnas no variarían su voto el próximo 10 de noviembre. En comparación con el resto de partidos, Vox se sitúa como el más fiel (79%), seguido de PSO​E (74,7%), Unidas Podemos (74%) y PP (71,9%).

En cuanto a la intención de voto por autoposicionamiento ideológico, los datos refrendan a los anteriores. La indecisión y la desmovilización es mayor en el electorado de Ciudadanos. De hecho, el partido liberal estaría por detrás del PSOE en esta franja. Los socialistas aglutinarían al 17,7% del votante de centro.

El electorado comprendido en esta franja ideológica no cuenta con un sesgo identificativo claro, pues el 20,3% de ellos se decanta por el PSOE. En cambio, el 18,8% y el 18% viran a la derecha en busca de Ciudadanos y el Partido Popular.

Coalición PSOE-Ciudadanos

Esta encuesta refleja que hasta un 70% de los encuestados naranjas se ha decantado por la coalición de PSOE junto a Ciudadanos. Una combinación quimérica, pues Rivera se ha cerrado en banda y no acepta a “Sánchez y a su banda”. Desde la noche electoral, el líder liberal ha insistido en ello, aportando cada vez más agresividad en su argumentación.

Pese a ello, el votante de Ciudadanos lleva la contraria al líder del partido liberal. Un 68,5% defiende que esta sería la mejor solución para España y, así, desbloquear la situación del país. Además, hasta dos tercios de los votantes naranjas dan el visto bueno a Rivera para que facilite la investidura de Pedro Sánchez y, así, evitar las elecciones.

El votante de centro, huérfano

Según arrojan los guarismos de esta encuesta de El Independiente, los votantes de Ciudadanos son los que menos representados se sienten. Su hastío con lo que han autodenominado centro político se hace patente. Hasta el 54,2% de ellos reclaman alternativas de centro, pues el partido naranja consumó su viaje a la derecha política, invitando al PSOE a ocupar ese hueco que dejaba en la mitad del espectro.

En general, el votante que se ubica en el centro político es el que más perdido se encuentra en la actualidad. Hasta un 62,2% echa de menos un partido que ocupe ese espacio en su definición más pura.