El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, ha comparecido en la sala de prensa del Congreso de los Diputados para insistirle a Pedro Sánchez en una reunión para aplicar el 155 en Cataluña. A colación de la Diada, el liberal ha requerido al presidente del Gobierno ir de la mano para cumplir con la Constitución.
“No es un derecho de Sánchez aplicar o no la Constitución, es una obligación”, indicaba Albert Rivera, quien considera que es él quien “lo debe hacer”. Considera que la aplicación del 155 serviría como plan de choque ante los planes de “dirigentes políticos sectarios” antes de que se lleven a cabo.
Critica que Sánchez “insulte a Ciudadanos” y, en cambio, “elija a Quim Torra como socio en Barcelona. No obstante, ha retomado el argumento del Plan Sánchez, alegando que el presidente del Gobierno prefiere a los independentistas, Bildu y Compromís como socios preferentes a los partidos “constitucionalistas”.
“¿Vamos a volver a esperar a que declaren de nuevo la independencia?”, se ha cuestionado Albert Rivera, que ha acusado a Sánchez de diseñar un “cordón sanitario contra los constitucionalistas”. “Es el mundo al revés”, se ha quejado el dirigente de los liberales después de enviarle una misiva con el mismo requerimiento que la rueda de prensa.
En este sentido, Albert Rivera describió la jornada del 11 de septiembre como un día “triste” para los catalanes. Ha repasado las imágenes en las que unos individuos acosaban a los periodistas y lamentaba que a Torra “le sale gratis” todo.
“Volvemos a las andadas”, predice Albert Rivera, que ha insistido en actuar contra el independentismo para acabar con un dirigente que “utiliza a la policía para sus intereses”, en referencia a la identificación de los Mossos del hombre que puso el himno de España durante la Diada.
Reunión del 155
Rivera le ha tendido la mano a Pedro Sánchez, pero sólo para discutir la viabilidad de la aplicación del artículo 155 y algunos pactos de estado que ya abordaron en una de sus escasas reuniones. El trabajo de la oposición “es tenderle la mano en los asuntos de Estado”. “¿Vamos a esperar a que cometan delitos como con Rajoy?”, se cuestionaba Rivera.
“Estoy dispuesto a hablar del cuándo, de sus competencias y límites”, anunciaba. Ha pedido a Sánchez que rectifique y, “en vez de insultarnos”, ha pedido al presidente del Gobierno que se pusiera del lado de los “partidos constitucionalistas”. “Rajoy y el PSOE me dijeron, en su momento, que había que levantar el 155. Yo creo que fue un error”, recuerda.
Asimismo, ha afeado a Sánchez los “insultos” que ofreció a Ciudadanos en la sesión de control. Atribuye, además, como arma ya preelectoral, que Sánchez la ausencia de gobierno y le señala como símbolo de estancamiento. “La culpa de que haya elecciones no es de Ciudadanos, es de Sánchez que no se sienta a negociar ni con sus socios”, sentencia el líder liberal.
“No podemos tener un candidato que ha perdido seis meses y que ni siquiera se ha sentado o llamado a su principal socio de Gobierno”, zanjaba el líder naranja.
