El pasado 20 de noviembre, en la Audiencia Nacional se consumó un cambio de jueces fundamental en los juicios que más afectan al Partido Popular. Ugolpe judicial tan a cámara lenta que se realizó en el sexto aniversario de la primera victoria electoral de Mariano Rajoy. Sin embargo, uno de los jueces clave en la estrategia, Juan Pablo González González, podría ser recusado en base a su afinidad con el PP, hasta el punto de que participó en hasta cuatro cursos de FAES, la fundación vinculada al partido conservador, llegando a compartir mesa con un imputado en el caso Gürtel, el mismo caso en el que ahora tiene que dictar sentencias. 

Juan Pablo González fue designado el pasado 20 de noviembre por la Sala de Gobierno de la Audiencia Nacional para formar parte del tribunal que juzgará cuatro piezas separadas del Caso Gürtel. Con la misma jugada, también era apartado el magistrado Julio de Diego, uno de los dos responsables de haber citado a declarar a Mariano Rajoy en el primer juicio Gürtel.

Además, González sustituye al otro responsable de esa citación histórica, José Ricardo de Prada, como redactor de la sentencia en uno de los juicios claves a los que se enfrenta el PP: el de su Caja B, conocido como papeles de Bárcenas. Este magistrado, que lleva varios años encadenando una situación de interinidad en la Audiencia Nacional, ahora será también quien redacte las sentencias de otras piezas del caso Gürtel: Aena, Jerez y la visita del Papa a Valencia.

Durante la época en la que González participó en los cursos de FAES, la fundación del PP contaba entre sus patronos con varias personas vinculadas a los papeles de Bárcenas sobre los que tendrá que decidir, como Mariano Rajoy, Ángel Acebes, Esperanza Aguirre, Francisco Álvarez-Cascos, Javier Arenas, Jaime Ignacio del Burgo, Jaime Mayor Oreja, Eugenio Nasarre, Rodrigo Rato y Federico Trillo-Figueroa.

Con Carlos Lesmes y Clemente Aguado

Aunque en el año 2016 FAES se desvinculó de Génova cuando Rajoy dio orden de retirarles la financiación como represalia a las críticas de Aznar, la relación sigue siendo estrecha y lo era aún más entre los años 2003 y 2005, cuando González participó en cuatro cursos de la entonces fundación del PP. Según las memorias de FAES, en junio de 2003 acudió al ciclo “La legitimación del Estado de Derecho en el País Vasco”, donde participó en dos cursos: el primero, el día 12, titulado Euskadi: jueces “de verdad” Para la democracia; el segundo el día 19, titulado Educación, información y justicia: Tres columnas para la democracia en Euskadi.

En el primero de ellos, González estuvo acompañado por Carlos Clemente Aguado, exviceconsejero de Inmigración de Esperanza Aguirre en la Comunidad de Madrid que empezó como asesor del ministro de Justicia, José María Michavila. Clemente ha sido juzgado en el primer juicio de Gürtel y ahora espera sentencia. Para él se piden ocho años de prisión por adjudicar contratos a las empresas  de Francisco Correa y haber cobrado 13.600 euros de comisión, según refleja la contabilidad de la trama.

Entre otros ilustres participantes en dicho curso se encontraba también Carlos Lesmes, actual presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Y también Juan Soler-Espiauba, actual senador designado por Madrid y diputado del PP en la Asamblea de Madrid. Su actual condición de aforado parece ser lo único que lo separa de la imputación en el caso Teatro, donde la Policía le acusa de amañar contratos cuando era alcalde de Getafe.

Pero, volviendo al juez González, las memorias de FAES registran hasta dos cursos más donde fueron honrados con su presencia. Un año después, en mayo de 2004, el ahora juez de la Audiencia –pero que entonces era presentado como vocal del CGPJ y miembro de la conservadora Asociación Profesional de la Magistratura- fue el ponente del seminario ¿Se cumple la ley en la CAV?. En dicho encuentro estuvieron también el diputado vasco del PP Leopoldo Barreda y el expresidente de la Diputación de Toledo, Arturo García-Tizón.

Por último, en el año 2005 González acudiría a un cuarto curso, titulado El futuro de los Tribunales Superiores de Justicia. Dicho seminario estaba englobado dentro de un ciclo mayor organizado por FAES y que se centraba en “La reforma del Estatuto de Cataluña”.

El antecedente de Enrique López

Estas relaciones llevan a pensar que González podría acabar recusado, como les sucedió en el pasado a los jueces Concepción Espejel y Enrique López, por su falta de imparcialidad dados sus vínculos con el Partido Popular.  La participación en los cursos de FAES fue una de las razones por las que la Audiencia Nacional aceptó recusar al magistrado Enrique López y apartarle tanto del primer juicio de Gürtel como del caso que ahora llevará González, el de la Caja B del PP o Papeles de Bárcenas.

Según decidió por dos veces la Sala de lo Penal, con 14 votos a favor y cuatro en contra, la colaboración con la fundación del PP incumplía la jurisprudencia del Tribunal Constitucional y del Tribunal Europeo de Derechos Humanos que señala que un juez no sólo debe ser imparcial, sino parecerlo. Además, se señalaba que Enrique López había llegado a cobrar más de 13.000 euros de FAES. Está por saber si el juez González también cobró.