La escalada de tensión en Cataluña, con el incremento de actividades de los autodenominados Comités de Defensa de la República (CDR), las declaraciones de Torra llamando a una posible independencia violenta, como en Eslovenia y las acusaciones a la Consellería de Interior de dejación de funciones por inacción de los Mossos de Esquadra, parecen situar al Consejo de Ministros del día 21, que se celebrará en Barcelona, en mitad de un "escenario caliente". Y es por esta escalada por lo que el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, ha dicho esta mañana, en un desayuno informativo, que "hay que valorar si las cosas que se hacen para bien consiguen un resultado positivo, lo que el Gobierno siempre debe preservar es la convivencia", lo que ha inducido a pensar si el Gobierno se estaba replanteando su reunión en Cataluña.
Estas palabras de Ábalos, expresadas a título personal, han sido corregidas inmediatamente por la Moncloa, desde donde se ha transmitido que "por supuesto" que el Consejo de Ministros del día 21 se celebrará en Barcelona, como estaba previsto. "No hay dudas al respecto", han dicho fuentes del Ejecutivo, según informa Europa Press.
El propio Ábalos ha querido despejar esas dudas posteriormente, en nuevas declaraciones a la prensa, en las que ha asegurado que el Consejo de Ministros en la Ciudad Condal "se va a hacer". Y ha recordado que en el desyuno informativo, no sólo se expresó a tìtulo personal, sino que advirtió de que la posibilidad de que el Ejecutivo no se reuniera en Barcelona "no estaba sobre la mesa".
No es la primera vez que Ábalos tiene que matizar sus palabras o cambiar el sentido de sus declaraciones. Ya ha ocurrido con respecto a las fechas en las cuales se podrían celebrar las próximas Elecciones Generales, con respecto a los Presupuestos Generales del Estado o la posibilidad de que el PSOE federal intervenga en la federación andaluza si Susana Díaz no consigue formar Gobierno.
