El pasado mes de julio salió a la luz que el Gobierno de Pedro Sánchez presentaba entre sus miembros a un alto cargo imputado. Manuel Arenilla Sáez, director del Instituto Nacional de Administración Pública, fue imputado en el caso Máster el 14 de junio.
Dentro de la investigación de los polémicos títulos de la Universidad Rey Juan Carlos, Arenilla parece estar implicado como uno de los profesores de Cristina Cifuentes. Siendo catedrático del Área de Ciencia Política y de la Administración de la URJC desde el año 2005, Arenilla afirmó que dio clase a Cifuentes en su asignatura, semipresencial, y que le calificó con una nota de 5.
El Ministerio encargado aseguró que la destitución de Arenilla sería inminente. Fijaron como fecha límite el “final del verano”. Y defendían que si no lo habían hecho antes es porque todavía se estaban produciendo cambios en los altos cargos. El Gobierno de Pedro Sánchez ya había entrado en La Moncloa cuando se conoció la imputación de Arenilla. El retraso de su destitución se debe, según el Ministerio responsable, a que el INAP no tiene actividad en verano y a la carga de trabajo derivada del traspaso de poderes.
A todo esto, Manuel Arenilla está relacionado con las partidas de dinero público que la Comunidad de Madrid le entregó al Instituto de Derecho Público de la URJC en los años en los que Pablo Casado y Cristina Cifuentes cursaron su máster. El vínculo existente entre Arenilla y el Partido Popular abarcan también a la participación en cursos y ponencias de FAES, fundación presidida por José María Aznar, que dependía del PP hasta el año 2016.
El pasado día 14 de septiembre, el Boletín Oficial del Estado publicó el cese de Manuel Arenilla Sáez. "Vengo en disponer el cese de don Manuel Arenilla Sáez como Director del Organismo Autónomo Insituto Nacional de Administración Pública, agradeciéndole los servicios prestados", comunica la ministra de Política Territorial y Función Pública, Meritxell Batet.
Parece que la intención de limitar la fecha hasta que acabara el verano la han tomado rigurosamente, teniendo en cuenta que nos encontramos en la última semana de la época estival.