Según apunta El Periódico, los profanadores de las tumbas de Dolores Ibárruri, la Pasionaria, y el fundador del PSOE, Pablo Iglesias, habían estado en esa misma mañana en la manifestación por la unidad de España y contra el Gobierno de Sánchez, convocada por el Partido Popular y Ciudadanos, y apoyada por la extrema derecha, con Vox a la cabeza. 

Tal y como informa el mencionado medio, la Policía ya trabaja con esta información, y además tiene en su poder varios testimonios de trabajadores de La Almudena en los que narran cómo vieron llegar a un grupo de fascistas alterados y enalteciéndose de haber estado anteriormente en la manifestación de Colón. 

Asimismo, estos mismos testimonios indican que cuando estos ultraderechistas llegaron al cementerio, empezaron a gritar cánticos a favor de España, entonar el cara al sol, con el brazo en alto, frente a un monumento a los Caídos de la División Azul, el grupo fascista español que luchó con los nazis contra el ejército de la la Unión Soviética.

Entonces, se percataron de que en dicha sepultura alguien había pintado el símbolo anarquista. Y a modo de venganza, decidieron mancillar las tumbas de La Pasionaria y Pablo Iglesias.