¿Qué hubiese pasado si Carles Puigdemont declaraba la independencia de Cataluña y se hubiese atrincherado en las entrañas del Parlament? Nunca se sabrá cómo hubiese sido ese momento con todo lujo de detalles, pero lo que sí ha trascendido es el plan que diseñaron las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado por si al expresident le daba por proclamar la DUI.
Así lo ha contado El Periódico, que asegura que parte del personal policial era consciente de una suerte de estratagema para ‘asaltar’ el Parlament con la declaración de la DUI. Varios de los agentes que iban a participar en ese operativo han asegurado que se trataba de un "plan de contingencia”.
300 agentes
“Fue un briefing en uno de los barcos”, declara uno de los policías que serían partícipes de esta operación, que cuenta que “una mañana nos dieron una explicación de qué podía suceder”. Relata que si el expresident “declaraba la independencia”, los agentes tomarían el Parlament si Puigdemont y el resto de su equipo se atrincheraban en el edificio. “Tendríamos que actuar”, señala dicho agente a El Periódico.
Este plan de contingencia contaba con la colaboración de cinco grupos de las Unidades de Intervención Policial (UIP), quienes, en su mayoría, ya fueron partícipes de las actuaciones policiales del 1-O. El cometido de este grupo sería “limpiar” el parque de la Ciutadella de manifestantes que habían acampado en la entrada del Parlament.
Tras esto, los Grupos de Acción Rápida (GAR) de la Guardia Civil, con más de 300 agentes desplazados a Cataluña, recogerían el testigo de las UIP para acometer la incursión en el Parlament y detener a los políticos allí atrincherados, incluyendo al expresident Carles Puigdemont.
Por tierra y aire
“El plan tenía varios escenarios detallados”, señala un miembro de la Benemérita que reconoce que se contaba con helicópteros de miembros de la Unidad Especial de Intervención y los GEO de la policía descenderían a la azotea del Parlament. Una incursión que bien parece sacada de una película o de una novela
Entre tanto, bajo tierra, una quincena de policías del Grupo de Operaciones Especiales irrumpirían desde las cloacas aledañas al edificio gracias a que tenían en su poder planos de las alcantarillas y túneles de esa zona de Barcelona.
Como todo plan, también recogía los puntos más débiles de la institución catalana, pero también de la tapia de la Ciutadella, el aeropuerto del Prat, centros de coordinación de transportes y oficinas de la Policía Nacional en Girona y pasos fronterizos.
El Govern lo sabía
300 policías y guardias civiles estaban destinados a detener a Puigdemont y al resto de miembros del Govern si el expresident declaraba la independencia. Sin embargo, este posible escenario llegó a oídos del gobierno catalán a través de un informe de la Comisaría General de Información de los Mossos datado el 27 de septiembre de 2017.
El citado documento, según relata El Periódico, advertía de la “contundente reacción del “Estado español”, incluyendo "el estado de sitio recogido en la Constitución española”. Además, se preveía una más que factible “ocupación permanente del parque de la Ciutadella. Así lo reconoce un miembro del entorno de Carles Puigdemont, que reconoce que “llegaron a temer que les iban a detener en el Parlament”.
