El Partido Popular prepara su convención nacional por todo lo alto. Se celebrará en Valladolid los días 31 de enero y 1 y 2 de febrero y será todo un desembarco de dirigentes del PP llegados de toda España, Presidentes autonómicos, ministros y dos estrellas estelares, el Presidente del Gobierno y presidente del partido, Mariano Rajoy y el ex Presidente del Gobierno y presidente de honor del partido, José María Aznar. La dirección del PP no quiere dejar ningún cabo suelto porque esta convención debe ser la escenificación de la 'remontada' y el pistoletazo de salida de la campaña a las elecciones europeas.

Rajoy se lleva la convención a la ciudad de Soraya
Valladolid, la ciudad elegida, tiene mucho simbolismo y la elección da pié a alguna lectura política. Por ejemplo es la ciudad natal de la Vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, persona de máxima confianza de Rajoy cuyo poder en el Gobierno ha provocado cierta tensión con la número dos del partido, Dolores de Cospedal. La Vicepresidenta jugará en casa y a buen seguro será aclamada. Pero además Valladolid es la ciudad desde la que José María Aznar inició la 'reconquista' de España para la derecha española. Allí, como Presidente de la Junta de Castilla y León inició su carrera política y desde Valladolid consiguió arrebatarle el liderazgo del PP a Fraga para, posteriormente, conseguir la primera victoria electoral de los conservadores en unas elecciones generales.

Todas las plazas hoteleras reservadas
El desembarco de dirigentes del PP más sus asesores y trabajadores ha provocado que los hoteles de Valladolid cuelguen el cartel de 'completo' para esos tres días. La dirección del partido ha bloqueado todas las habitaciones de los hoteles de cuatro y tres estrellas. Sin duda el sector hotelero y hostelero de la capital  castellana aguarda la convención como bálsamo para sus cuentas, porque también los restaurantes esperan hacer pleno con las comidas y cenas, más o menos conspiratorias, de rigor.

Demostración de poderío
La dirección del PP no quiere filtraciones sobre puesta en escena o contenidos, pero según ha podido saber ELPLURAL.COM todo, desde el escenario, hasta la entrada de  los líderes y los mensajes tiene un objetivo: demostrar el 'poderío' del PP. Se tendrá mucho cuidado en no hacer ostentación en tiempos de crisis, pero la convención será el pistoletazo de salida a la campaña de las europeas y el PP quiere hacer una demostración de fuerza. El mensaje fuerza será: el PP ha sacado a España de la crisis, España vuelve a su sitio después de dos años duros para enmendar el 'desastre' heredado de los socialistas. Obviamente el PP y toda su prensa afín ocultarán que dos años después de la llegada de Rajoy a La Moncloa sigue habiendo medio millón más de parados de los que 'heredó' de Zapatero según el antiguo INEM y un millón más de desempleado según la EPA. Tampoco dirán nada sobre la deuda pública, que este año llegará al 100% del PIB, el nivel más alto desde hace más de un siglo. El PP venderá el 'nuevo milagro económico', y ese será el mensaje central.

Víctimas del terrorismo y Cataluña
Lo dijo Rajoy en la primera reunión de la dirección del partido de este año: solo quiere que se hable de economía, pero asuntos como la Ley del aborto que ha divido al PP y, sobre todo, el referéndum independentista de Cataluña y las quejas de las víctimas del terrorismo tendrán su lugar. El PP sabe que la derogación de la 'doctrina Parot' por parte del Tribunal de Estrasburgo y la ex-carcelación de etarras ha provocado el enfado mayúsculo de las organizaciones de víctimas de terrorismo que antaño eran incondicionales del PP. Prueba de ese enfado es el nuevo partido político,  creado por Ortega Lara, y aunque en el PP creen que les puede hacer escaso daño electoral temen que el asunto pueda ir a más. Quizá por ello el PP está pensando en organizar un acto-homenaje a las víctimas del terrorismo.
En cuanto a Cataluña el mensaje será de Rajoy y será claro: no habrá referéndum.

La incógnita de Aznar
Si tiene simbolismo que la convención se celebre en Valladolid para Aznar, es toda una incógnita lo que pueda decir el expresidente después de la famosa entrevista concedida el año pasado en Antena 3 en la que criticó con dureza la política de Rajoy. ¿Hablará o no Aznar? ¿Apoyará o criticará a Rajoy? ¿Se limitará a un discurso neutro para no robar protagonismo a Rajoy? Planeen lo que planeen Rajoy y Cospedal, Aznar siempre es motivo de inquietud para la dirección actual del PP.