La diputada del PP Cayetana Álvarez de Toledo ha defendido que Isabel Díaz Ayuso se presente como candidata al congreso extraordinario del PP porque, según ha dicho, "sería una líder formidable y una gran líder del partido y del Gobierno". Igualmente ha valorado positivamente el liderazgo de Alberto Núñez Feijóo, que es "un adulto en una etapa de enorme puerilidad en la política".

En declaraciones a TVE, la diputada popular ha enviado un dardo a Pablo Casado al afirmar que "le he oído a decir que entiende la política como la entrega a los compañeros, y esas son palabras muy bonitas que comparto, pero también tengo que decir que la entrega a los compañeros empieza por respetar la presunción de inocencia", y le ha reprochado que no lo haya hecho respecto a la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, a la que se ha acusado sin pruebas y con infundios de tráfico de influencia y de corrupción.

"Los hechos son los dossieres y los juicios paralelos"

Álvarez de Toledo ha añadido que puede entender, en "lo humano y lo personal" lo que está pasando el líder popular, pero "lo importante frente a los sentimientos son los hechos y entender por qué esto ha sucedido y por qué Pablo Casado aparentemente va a dejar la Presidencia del partido y también lo ha hecho el señor García Egea en el día de ayer, y los hechos son, no, como afirman, que hayan querido limpiar el partido, sino que se ha ensuciado la política con hechos que son devastadores: utilización de dossieres, filtraciones y juicios paralelos".

Álvarez de Toledo ha recordado que la crisis del PP se desató a raíz de haber acusado "sin pruebas" a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, de "tráfico de influencias y corrupción". Por ello, ha asegurado que espera que Casado dimita ya para que "se inicie una nueva etapa", "un proceso de regeneración" que prepare al PP como "alternativa ideológica, intelectual y moral" al Gobierno de Pedro Sánchez.

La diputada ha criticado que no se haya invitado a Díaz Ayuso a la reunión convocada con los barones del partido por Casado, "una cierta mezquindad" porque la presidenta madrileña "es uno de los valores más sólidos del centroderecha, sino el más sólido electoralmente".