A pesar de la ambigüedad con la que Mariano Rajoy suele expresarse en sus entrevistas en la de este jueves en Onda Cero se las ha apañado para indignar a los oyentes. Lo ha hecho con su confianza en la lluvia para resolver el problema del precio eléctrico y con su presunto desconocimiento de que el abogado del PP intento tumbar el juicio por la Gürtel. Y ha conseguido generar más malestar, por ejemplo entre los referentes del cine español, por haber admitido abiertamente su falta de interés por el mismo. Cuando le han preguntado por las candidatas a los premios Goya, Rajoy ha dicho: "No las he podido ver, para mi desgracia no voy al cine, leo novelas". 

La falta de apoyo a su sector ha llevado al director Juan Antonio Bayona, reconocido internacionalmente y uno de los favoritos de cara a la próxima edición de los Premios Goya con la película Un monstruo viene a verme", ha lamentar una actitud que considera difícil de ver en otros países. "Un presidente que no ve el cine que se hace en su país no es por falta de tiempo sino de interés. Un desprecio impensable en otros países", ha asegurado Bayona en un tuit. 



Al público sí le interesa
Con una recaudación de 26 millones de euros y 4,5 millones de espectadores, "Un monstruo viene a verme" fue la película más taquillera el año pasado en España, por encima de cualquier superproducción de Hollywood, y acumula 12 nominaciones para los Goya. Otras de las favoritas, como "El hombre de las mil caras" de Alberto Rodríguez, sobre el exespía Francisco Paesa o "Tarde para la ira", el aclamado debut de Raúl Arévalo, con once nominaciones cada una, están disponibles ya en plataformas "online". En 2016 y según resume EFE el cine español continuó su idilio con el público con una recaudación de más de 109 millones de euros y 18,14 millones de espectadores. La cuota de pantalla fue del 18,1 %, el cuarto mejor dato histórico.