El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha decidido no acudir al juzgado de primera instancia número 44 de Madrid, donde estaba citado como demandado por la disolución del comité provincial de su partido en Barcelona, el 1 de octubre de 2019.

La juez ha rechazado que otro miembro del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de la formación de ultraderecha responda en vez de Abascal a la demanda civil interpuesta por varios afiliados, que alegan una vulneración de su derecho fundamental a la participación política.

Según señala El País, la juez podría imponer una sanción económica a Abascal, aunque también podría quedarse en una renuncia a defender los propios argumentos

Abascal ha dado varias versiones a la juez. Primero dijo encontrarse en Hungría en esta fecha para después añadir que no había asistido a la reunión del CEN en la que se decidió el cese de la dirección la dirección de Barcelona.

Como testigos han acudido el secretario general de Vox, Javier Ortega Smith, y el responsable de Organización, David Lucas, además de la expresidenta del comité cesado en Barcelona, Lola Martín, y un exvocal del, José Manuel Arias Flores.

El concejal y diputado ha defendido el acta de la reunión del CEN del 1 de octubre de 2019 que dispone el juzgado está manipulada. Tanto Lucas como Arias han asegurado que el segundo presentó su dimisión de manera verbal en septiembre de 2019, por lo que la dirección nacional cesó a toda la dirección barcelonesa. Por su parte, su presidenta, Lola Galán, ha admitido haber expresado en mayo de 2019 su deseo de dejar el cargo, pero nunca llegó a formalizar la dimisión.