Ian Gibson nació en Dublín en 1939. Vino a España siendo un adolescente, en 1957, para realizar su tesis doctoral sobre el granadino universal, Federico García Lorca, y acabó investigando, en vida de Franco, las circunstancias del asesinato dedicándose intensamente a buscar el paradero ignoto de sus restos. Se enamoró perdidamente de la cultura española, de su naturaleza, de su ser, de su historia... en realidad se hizo español mucho antes de adquirir la nacionalidad oficialmente. Alguien escribió medio en broma que "llegó a España persiguiendo gansos y terminó persiguiendo la verdad". Este gran hispanista, biógrafo de Lorca, Dalí, Buñuel o Queipo de Llano y narrador e investigador de la Guerra Civil, se infectó del virus hispano cuando de jovencito y en una librería de Dublín encontró el Romancero Gitano. Ahí comenzó el idilio y lo recuerda afirmando que "No sabía el idioma, pero algo se comunicó conmigo". Luego continuaría el amor apasionado con Federico, con Machado con el Quijote y hasta con los boquerones en vinagre. 

Esta es la tercera entrevista que le realizo. Hace dos años tuvimos distintos encuentros en Málaga, donde estableció durante dos años su segunda residencia. Vivía a  caballo entre Madrid y la ciudad andaluza, en su casa de La Malagueta, con bellísimas vistas al Mediterráneo. Allí me contó su faceta de ornitólogo, su lucha y cabreo permanente por la Memoria Histórica reducida al mínimo por gobiernos conservadores, los déficits en políticas sociales y los superavits en recortes, el abandono de la cultura por parte del PP... Descubrí que, detrás de un hombre duro en su verbo como pétreas son sus convicciones y contundente en sus afirmaciones, hay una persona tierna, sensible y muy humana. Por eso no es que Ian sea un español-irlandés, es que Gibson es un patriota español con sangre irlandesa, un intelectual que no solo quiere a España, sino que le duele España. Un patriota de verdad, un español auténtico de bellos rizos británicos, tez clara y rostro irlandés, pero con alma hispana, un patriota de verdad, no de hojalata. Decía Rainer María Rilke que "La verdadera patria del hombre es la infancia". Gibson se carga literalmente esta idea del escritor austriaco porque su patria es España. A Irlanda, su país natal y su tierra de infancia, la quiere, y mucho, pero no tanto como ama a la piel de toro.

Este es un encuentro oportuno (siempre lo sería con el hispanista), ya que Gibson se retira un tiempo porque como me dice "Ahora me meto en una cueva y termino mi revisión del asesinato de García Lorca". Una entrevista pergeñada en el trayecto de un AVE Madrid-Málaga. Nunca 528 kilómetros me parecieron tan cercanos en el tiempo. Nunca con ganas de no acabar un viaje... ¡ni para echar un cigarro!


 

¿Cree que la situación que sufre Cataluña está haciendo emerger un patriotismo hispano tal vez escondido o acomplejado ante el esgrimido siempre por la derecha?

Entiendo que muchos españoles, que hasta hace poco apenas se preocupaban por Cataluña, están ahora dándose cuenta de su ignorancia o indiferencia al respecto.  Si la derecha de este país realmente amara a Cataluña y la sintiera como algo suyo, algo propio, algo consustancial -y esto es lo que siempre alega- habría hecho un esfuerzo, durante la llamada Transición y después,  por tender puentes de verdadero entendimiento entre ella y el resto del país. En primer lugar promocionando el conocimiento del idioma de Pla y Verdaguer (latín, al fin y al cabo, como el castellano, el portugués, el francés, el italiano...). Pero no se  hizo casi nada en este sentido.  Por otro lado, ¡qué suerte tienen los catalanes al nacer bilingües!  Mi impresion, sin embargo,  es que muchos de ellos no aprecian suficientmente las ventajas que les da esta circunstancia. Incluso he conocido a "indepes" que dan la sensación de odiar el castellano. ¡Qué imbecilidad! ¡Que gilipollez! ¡Qué fanatismo más absurdo y autocastrante!

Ian, ¿qué solución atisba para cerrar heridas -si se puede ya- para Cataluña?

Yo sueño con la República Federal Española y, si pudiera ser, Ibérica, donde Cataluña encajaría perfectamente.¿No somos ya mayores, no hemos aprendido nada? El presidente, elegido libremente por los ciudadanos, podría proceder de cualquier rincón de la península. Sería fantástico. Se abo liría el Senado, prácticamente inútil, y en su lugar tendríamos la Cámara Territorial de la cual tanto se ha hablado, sin que se la vea por ningún lado, con todos los idiomas del Estado utilizándose y oyéndose como algo habitual y con orgullo. Esto sí que sería cultura. La capitalidad podría ser  compartida por Madrid, Barcelona  y, en su caso, Lisboa. Miro a mi alrededor y veo a los políticos que tenemos hoy y me pongo alicaído. Es la provisionalidad de siempre. Nadie habla de cultura, de Pessoa, de Cervantes, y me percato de que no voy a ver realizado mi sueño. ¿Por qué no hay un gran proyecto de futuro? La Península Ibérica las tiene todas para ser un paraíso ¡pero qué lejos estamos de verlo! ¡Si ni hay un tren diurno de Madrid a Lisboa! El anhelo de un brexit catalán  me parece ridículo, patético, masoquista. Que se ensaye, primero, la España federal y luego veríamos. 

Siempre ha demostrado una aguda capacidad para el análisis político contemporáneo desde su perspectiva de historiador ¿Cómo ve el futuro más inmediato del socialismo español?

Creo que, en medio de la actual carencia de grandes líderes políticos, aquí y fuera, Pedro Sánchez tiene talla de estadista europeo. Su resurrección ha sido digna de El Cid y me atrevo a decir que providencial. Espero las próxima elecciones generales con ilusión. ¡Ah! e Iceta me parece formidable, con un sentido del  humor que tanta falta hace en la política española actual. 
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¿Seguimos retrasados en España a la hora de desarrollar la Memoria Histórica?

Retrasadísimos, vergonzosamente. Es la asignatura pendiente más acuciante que tenemos. Me asquean los tics de la derecha en relación con el asunto, porque la verdad, en contra de lo que ellos dicen, es que nadie quiere reabrir heridas. Es una cuestión de justicia, de decencia, de ética. Mariano Rajoy incluso se ha jactado de no haber dado ni un euro para ayudar. Si yo tuviera un abuelo en una cuneta lo buscaría, para darle digno entierro. Quiero creer que los deslenguados Rafael Hernando y Pedro Casado también. Y luego dicen que son cristianos. En Málaga, con un alcalde del PP a la cabeza (Francisco de la Torre), sí se han hecho los deberes, sin problema alguno.  

Hipotéticamente. ¿Con qué sobrenombre cree que podría conocerse a Mariano Rajoy en los libros de historia?

Buena pregunta. Quizás Mariano Postergo Luego Soy.     

¿Nuevo libro de García Lorca a la vista? ¿Qué nos descubrirá?

Voy a sacar una edición revisada de mi investigación sobre su asesinato. La primera fue publicada en 1971 por Ruedo Ibérico, en París, y se prohibió  en seguida en España. Desde entonces han pasado muchas cosas (y muchas décadas) y sabemos más. Es increíble la cantidad  de páginas impresas dedicadas desde entonces al trágico suceso. García Lorca hoy es el desaparecido más célebre y más llorado del mundo entero. No exagero. Es terrible que no sepamos todavía dónde están sus restos. Quizás  esto cambie pronto, así lo espero.   
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¿Qué otros proyectos de publicaciones, investigación, conferencias, personales alberga a corto y medio plazo?

A lo largo de los últimos tres años he revisado lo más importante de mi producción y ahora quiero volver a la ficción. Casi medio siglo hurgando en archivos (en España, en Inglaterra, en Francia, en Cuba, en Buenos Aires, en Nueva York...), ¡ya basta! Ahora incumbe ver si soy capaz de hilvanar, sin  tener que consultar más archivo que el de mi memoria y el de mis lecturas, la novela que llevo percibiendo desde hace tiempo.     

Hace dos años, durante su tiempo de residencia en Málaga compartida con Madrid, descubrí en nuestros encuentros su faceta -que pocos conocen- de ornitólogo. ¿Cómo la lleva?

Sí, soy ornitólogo desde mis años más “tiernos” en Irlanda, gracias a mi padre, amante de la Naturaleza.  Conocer las dunas de Doñana al amanecer fue una de mis experiencias fundamentales. El otro día unos amigos me llevaron a una laguna cerca de Villacañas.Tenía poca agua, por desgracia, y había muchas aves acuáticas agrupadas en la que quedaba.  Llevaba mis prismáticos y sentí la vieja emoción de siempre. ¿Qué aves son?  Me entusiasman sobre todo los patos, ánsares y limícolas.  

Hablando de ornitología ¿tardará mucho el momento en que Mariano Rajoy ejerza esa etapa política de los presidentes que los estadounidenses denominan del "pato cojo"?

Me gustan los patos, como le acabo de decir, y tampoco me preocupa si tienen cojera. Yo, la verdad, casi le voy cogiendo un poco de cariño a Rajoy (con quien nunca he cruzado una palabra). Hay que entender que no tiene la culpa de ser quien es, pues todos somos criaturas moldeadas por nuestras circunstancias particulares, entre ellas los padres que nos tocaron (y los  tatarabuelos). Creo que se le nota más, últimamente, su acento gallego. Esto me gusta. Le queda poco tiempo en el poder y espero que lo disfrute (el tiempo, quiero decir, no el poder), y que siga recordándonos que un plato es un plato, o sea que una lamprea es una lamprea. Porque a veces uno llega a creer que no hay nada sólido a que aferrarse en este mundo.