La maquinaria de The Rolling Stones, una de las bandas más longevas y legendarias de la historia del rock, vuelve a enfrentarse a una realidad inevitable: el paso del tiempo. Según informaciones publicadas en la prensa británica, el grupo habría decidido descartar los planes para una gira por estadios de Reino Unido y Europa en 2026 debido, principalmente, al delicado estado de salud de Keith Richards. El guitarrista, piedra angular del sonido y la actitud de los Stones, arrastra desde hace años una dura batalla contra la artritis que estaría dificultando su capacidad para afrontar las exigencias físicas de una gira de gran formato.
La noticia apunta a que Richards no se encontraría en condiciones de comprometerse con un calendario intenso de conciertos, viajes y ensayos. Aunque la gira nunca llegó a anunciarse oficialmente, las expectativas eran altas tanto entre los fans como dentro de la industria musical, especialmente después del exitoso regreso discográfico del grupo con Hackney Diamonds (2023).
De hecho, fue el propio Chuck Leavell, pianista de la banda desde los años ochenta, quien alimentó recientemente esos rumores al declarar a la prensa británica que The Rolling Stones tenían la intención de volver a girar por Reino Unido y Europa. De haberse materializado, habría sido la primera gran gira europea de los Stones desde el final de su tour estadounidense en 2024 y su regreso a los escenarios británicos tras el recordado concierto en Anfield, Liverpool, en 2022.
Sin embargo, quienes han seguido de cerca las últimas actuaciones del grupo saben que Keith Richards ha tenido que lidiar con limitaciones cada vez más visibles sobre el escenario. A sus 81 años, el guitarrista ha reconocido en diversas ocasiones que la artritis afecta seriamente a sus manos, obligándole a adaptar su forma de tocar y a reducir esfuerzos. Aunque su carisma y presencia siguen intactos, el desgaste físico es un factor imposible de ignorar cuando se trata de giras de estadios que requieren un alto nivel de resistencia.
Pese a este parón en el terreno de los conciertos, los Rolling Stones no dan señales de retirada creativa. Al contrario: en los últimos meses han cobrado fuerza los rumores sobre nueva música. En septiembre, el productor Andrew Watt confirmó que había vuelto a trabajar con la banda para dar forma a un nuevo álbum. Watt ya fue clave en el regreso discográfico del grupo tras la muerte de Charlie Watts en 2021, un disco que fue recibido como una demostración de que los Stones aún tenían algo relevante que decir en el siglo XXI.
Las especulaciones se vieron reforzadas poco después por Ronnie Wood, quien confirmó públicamente que el grupo estaba inmerso en la grabación de nuevo material. Todo apunta a que este próximo trabajo podría ver la luz en 2026.
Así, mientras el futuro de los Rolling Stones sobre los escenarios europeos queda en suspenso, la banda parece optar por un repliegue estratégico hacia el estudio, un espacio más controlado y compatible con la realidad actual de sus integrantes. Para sus seguidores, la noticia es agridulce: la decepción por no verlos en directo se mezcla con la expectativa de escuchar nuevas canciones de un grupo que, seis décadas después de su fundación, sigue escribiendo capítulos en la historia del rock.