El universo de las criptomonedas, dominado hasta ahora por gigantes como Bitcoin y Ethereum, ha sumado en los últimos años un nuevo actor: las memecoins, monedas digitales que nacen de bromas, fenómenos virales o figuras de la cultura popular. A esta tendencia se ha sumado Kanye West, quien presentó recientemente Yeezy Money, un proyecto que incluye el token YZE, un procesador de pagos llamado Ye Pay y una tarjeta con la que gastar tanto YZE como la stablecoin USDC.
“El token oficial de Yeezy acaba de caer”, anunció West en un vídeo publicado en su cuenta de X, acompañado de un enlace al sitio web del proyecto. Según se describe allí, la iniciativa busca ofrecer un sistema financiero “libre de la autoridad centralizada”, un discurso que conecta con la retórica libertaria que a menudo acompaña al movimiento cripto.
Ye just dropped his own debit card called "YZY CARD"‼️🔥
— RapTV (@Rap) August 21, 2025
"YEEZY MONEY IS HERE..." 💳 pic.twitter.com/Rc1oLvnzRj
Un lanzamiento explosivo… y una caída igual de rápida
El debut de YZE fue tan espectacular como volátil. El precio de la moneda se disparó casi un 1.000% en cuestión de minutos, llevando su valor de mercado a los 3.000 millones de dólares. Sin embargo, la euforia duró poco: horas después, la capitalización se redujo prácticamente a la mitad, estabilizándose alrededor de los 1.500 millones, según datos de CoinGecko.
El fenómeno no es nuevo en el mundo de las memecoins. Dogecoin, creada en 2013 como una broma inspirada en el meme del perro Shiba Inu, ha logrado mantenerse entre las diez criptomonedas más importantes, con un valor de 33.000 millones de dólares. Pero otros intentos han terminado en fracasos estrepitosos. La influencer Haliey Welch, famosa por el viral “hawk tuah”, lanzó su propia memecoin en 2023, solo para ver cómo se desplomaba en cuestión de días.
Kanye launched a meme coin $YZY on Solana that hit a $3B market cap.
— MetaverseSG (@MetaverseSG) August 21, 2025
6 wallets hold over 90% of supply.
Liquidity pool has only $YZY, no USDC - meaning the dev controls the market.
You already know how this ends, right? pic.twitter.com/WaDFAeDjLK
La sombra de Donald Trump
El paso de Kanye West al terreno cripto llega poco después de que Donald Trump anunciara su propia moneda digital en enero. La llamada “TrumpCoin” llegó a rozar una capitalización de 9.000 millones de dólares antes de caer hasta los 1.700 millones actuales.
La familia Trump ha enmarcado su incursión en las criptomonedas como una respuesta a lo que denominan “desbancarización”: la supuesta negativa del sistema financiero tradicional a trabajar con ellos por motivos políticos. Eric Trump llegó a declarar en Fox Business que los bancos actuaron como un arma contra su familia.
En el caso de West, su historia no es muy distinta. En 2022, JPMorgan rompió relaciones con el rapero tras sus declaraciones antisemitas, justo después de que Forbes lo valorara en 2.000 millones de dólares. Desde entonces, su fortuna se ha reducido a unos 400 millones. La apuesta por Yeezy Money podría interpretarse como un intento de recuperar protagonismo —y capital— en un terreno que ya se ha convertido en refugio para figuras marginadas por la banca tradicional.
Entre la innovación y la especulación
El auge de YZE coincide con un contexto de efervescencia cripto. El mercado global de las criptomonedas ha superado los 4 billones de dólares, impulsado por el repunte del bitcoin y por la adopción de nuevas tecnologías financieras por parte de actores tradicionales de Wall Street.
Sin embargo, los expertos advierten que las memecoins son extremadamente volátiles y responden más a la popularidad de la figura que las respalda que a fundamentos financieros sólidos. En este sentido, el “efecto Kanye” puede ser tan pasajero como explosivo.
La propia historia de Dogecoin demuestra que una memecoin puede sobrevivir en el largo plazo, pero requiere de una comunidad sólida y de la implicación de figuras influyentes como Elon Musk, quien en varias ocasiones ha impulsado su valor con simples mensajes en redes sociales.
Ye y su visión sobre la “liberación financiera”
El interés de Kanye West por las criptomonedas no es nuevo. En 2020, durante una extensa entrevista con Joe Rogan, aseguró que los “genios” de la comunidad bitcoin representan una vía hacia la “verdadera liberación de Estados Unidos y la humanidad”. Para West, el criptoespacio encarna un futuro en el que el poder político y financiero no esté controlado por élites tradicionales.
Con Yeezy Money, el rapero parece materializar aquella visión. Sin embargo, su pasado reciente de polémicas y su reputación dañada por declaraciones racistas y antisemitas hacen que su aventura cripto sea observada con cautela.