"Se va una protagonista del cine italiano. Con la desaparición de Sandra Milo la pequeña y la gran pantalla pierden a una gran artista talentosa con un carisma abrumador". Con estas palabras la subsecretaria de Cultura Lucia Borgonzon ha despedido a Sandra Milo, muerta este lunes 29 de enero a los 90 años en Roma.  

Fue una de las artistas más populares del cine italiano, y es conocida sobre todo por ser musa del célebre director Federico Fellini, con quien mantuvo un largo romance secreto a lo largo de 17 años. Un secreto que, por cierto, la actriz no relevó hasta el año 2009.

Su muerte supone un punto final a una carrera de más de 60 años. Y es que Milo se mantuvo activa trabajando hasta hace bien poco: de hecho, su último trabajo es del 2023, año en el que participó en una serie italiana para Amazon Prime, “Gigolò per caso”, en la que participa en cuatro episodios.

El soltero (1955)

Se trata de una comedia hispanoitaliana, la primera de Sandra Milo, en la que la italiana comparte cartel con el célebre Fernando Fernán Gómez. En ella Milo interpreta a Gabriela, una joven que regenta una pequeña pensión a la que se acaba de trasladar Paolo, un tipo que rehúye del compromiso pese a la insistencia de su madre por verle casado.

Fellini 8½ (1963)

Esta gran obra maestra del cine italiano, dirigida por el maestro Fellini, no necesita presentación. Ganó dos premios Óscar y, además, en ella Sandra Milo –que interpreta a Carla—comparte cartel con Claudia Cardinale y Marcello Mastroianni. La película aborda la historia de un director de cine que atraviesa una crisis de creatividad mientras trata de hacer una nueva película.

La entrevista (1963)

Sandra Milo es Pina, una mujer que va a encontrarse un hombre que ha conocido a través del anuncio del periódico, Adolfo, que viene de Roma. Ambos están buscando una estabilidad emocional, pero no parece que sus personalidades sean compatibles. Así, se trata de una inteligente comedia italiana dirigida por Antonio Pietrangeli, que firma también el guion junto a Ettore Scola y Ruggero Maccari.

El parasol (1965)

Coproducción entre Italia, Francia y España que tiene lugar durante el puente de Ferragosto –así se conoce al puente de la Virgen de Agosto en Italia. Es en ese momento cuando Enrico, un ingeniero de 40 años, decide tomarse unas vacaciones y dejar Roma para pasar unos días con su mujer Giuliana, interpretada por Sandra Milo, en una colonia vacacional.

Giulietta de los espíritus (1965)

Se trata de una nueva colaboración de Milo con Fellini, que obtuvo el Globo de Oro a la mejor película extranjera y en la que la actriz interpreta a una joven enamoradiza que podría llevar al traste las ilusiones de su vecina Giulietta, que sospecha que su marido le está siendo infiel y busca recuperar su amor.