Entremeses: Langostinos cocidos, jamón, mojama con almendras fritas y queso semicurado.
¿Con qué?
Langostinos congelados crudos –lo que se ahorre en los langostinos lo puede usar para comprar un mejor jamón- jamón de bellota, mojama, almendras fritas y saladas –si se prefiere se pueden comprar crudas y se fríen en casa con aceite de oliva y moviéndolas para que no se quemen y queden doradas, se salan al gusto y listas- queso semicurado.
¿Cómo?
Los langostinos se dejan a descongelar en la nevera la tarde del día anterior. Por la mañana se dejan fuera quitándoles toda el agua que hayan soltado. Se pone bastante agua a hervir con un puñado de sal gorda y dos hojas de laurel. Cuando rompa a hervir se echan los langostinos y cuando de nuevo empieza a hervir se retiran del fuego y se deja que repose dos minutos. Con una espumadera y cuidando que no se rompan los langostinos se ponen sobre una fuente con hielo seco y se meten 5 minutos en el congelador. Se sacan, se tira el hielo y se ponen en un recipiente seco en el frigorífico hasta media hora antes de la comida en que se sacan, se ponen en la bandeja de servir y se les espolvorea un poco de sal –Maldon (inglesa) es muy adecuada-. El resto de los entremeses pueden ser los sobrantes de la cena del día anterior o sugiero la mojama cortada fina (se lo hacen en la tienda) y dispuesta en la fuente dejando un hueco en el centro donde pueden ir las almendras fritas saladas. El jamón y el queso semicurado no tienen secretos para servirlos en platos adecuados y por separado, en ambos casos en la charcutería y en la quesería le cortan el jamón en lonchas finas no demasiado grandes y el queso en triángulos.
Solomillo de ternera al horno con patatas parisien y cebollitas francesas.
¿Con qué?
Un solomillo de ternera, según los comensales, aceite de oliva virgen, una copa de brandy, una cucharadita de mostaza, media cebolla cortada en juliana, un vaso de agua, sal y pimienta. Para el acompañamiento cebollitas francesas y patatas parisien (se venden peladas y cocidas y envasadas al vacío).
¿Cómo?
El Solomillo lo pueden preparar en la carnicería limpiando la grasa y atándolo para que no se desparrame. Se deja macerar una hora en un poco de aceite de oliva virgen y media copa de brandy. Pasado ese tiempo se pasa por la sartén muy caliente con una gota de aceite. Y se reserva. En el mismo jugo y a fuego lento se pone la cebolla en juliana y cuando está transparente se coloca de base en un fuente de horno, encima el solomillo, se sazona de sal y pimienta, se le recubre con un poquito de mostaza, el brandy restante y se introduce en el horno previamente calentado a 200º. Se deja 5 minutos por cada lado y se baja la temperatura a 160º y se mantiene durante 30 minutos más si no es demasiado grande y cuidando que tenga jugo, echándole agua de vez en cuando. Las patatas parisien se ponen en el horno diez minutos antes de sacar el solomillo y las cebollitas francesas se fríen enteras y limpias de las hojas secas en aceite de oliva virgen a fuego muy lento y con unas gotas de brandy. Se saca el solomillo y se corta en rodajas como de un dedo pequeño. El jugo y la cebolla se pasan por la trituradora y se cuelan por el chino. Se coloca el solomillo partido en el centro de la fuente, al lado las cebollitas y las patatas parisien y la salsa en el centro para que cada uno se sirva a su gusto.
Dulces navideños clásicos que habrán sobrado de la noche anterior, y un poco de piña que es muy digestiva.