Con la cuarta ola de calor del verano a punto de comenzar, esta periodista quiso escapar de la gran ciudad sin hacer muchos kilómetros en coche. La playa estaba descartada por varias razones: la distancia y las aglomeraciones típicas de un asfixiante mes de agosto. Así, Cáceres se presentó como una opción interesante, que finalmente fue un acierto descomunal. Una lee "Garganta de los Infiernos" y no imagina, ni por asomo, el paraje que encontrará, tampoco invita su nombre a imaginar verdes árboles de troncos gruesos, ni idílicas cascadas de agua cristalina muy (muy) fría, digna del Mar Cantábrico. ¿Quién asociaría el infierno con un spa natural? Cómo nos engañan las apariencias...

Con las expectativas justas, esta madrileña eligió como destino para sus precarias pero merecidas vacaciones el municipio de Garganta La Olla, ubicado en las profundidades de la inexplorada provincia de Cáceres. Una localidad de apenas 1000 habitantes rodeada por la sierra de Gredos, que luce frondosa y majestuosa en pleno verano. Aquel lugar, con calles adoquinadas y casas reconstruidas que datan del siglo XVI, cuenta con una historia que se entrelaza con la grandeza de hace 5 siglos, pues se encuentra a 8 km del Monasterio de San Jerónimo de Yuste, donde se retiró y murió el emperador Carlos I de España y V de Alemania allá por el 1558.

Así, este destino improvisado combina la espectacular belleza de la madre naturaleza (apenas explotada en esta región) con un interés e importancia históricos, indispensable para cualquier amante de los viajes culturales. Además, si eres un apasionado de la astronomía, debido a la altura en la que se encuentra Garganta la Olla, así como a la considerablemente menor contaminación lumínica de la zona, podrás ver hasta la Vía Láctea.

Aunque, sin lugar a dudas, el mayor atractivo de Garganta la Olla, sobre todo en los meses más cálidos, es su ambiente fresco y rejuvenecedor que debe a su ubicación en las faldas de la Sierra de Tormantos y a las piscinas naturales, presas y ollas que deja a su paso el río Jerte, eje central de la Ruta de senderismo de la Garganta de los Infiernos. La suma de todo se materializa como un spa natural de calidad y belleza incalculable, perfecto para conectar con la naturaleza, explorar, cuidarse y relajarse.

Reserva natural protegida

La reserva natural de la Garganta de los Infiernos es conocida por su espectacular belleza escénica, cascadas y desfiladeros. Se trata de un área protegida que forma parte del Parque Natural de la Garganta de los Infiernos, y es famosa entre los más deportistas por sus impresionantes rutas de senderismo. Las cuales llevan a los visitantes a través de bellos paisajes de montaña que permiten explorar senderos -que a su vez conducen a lugares como la espectacular cascada del Caozo- y disfrutar de la rica biodiversidad que habita en la zona.

@elplural Descubre la #GargantaMayor en #Cáceres, una zona protegida y de gran belleza con piscinas naturales dignas de un emperador. #CarlosI eligió el #ValledelJerte para su retiro hace 5 siglos. ¡ Visita #GargantaLaOlla ! #goviral #España #viajes #naturaleza #Extremadura #elplural ♬ sonido original - El Plural

Un legado imperial

Pero Garganta la Olla no es solo un retiro natural, también es un lugar de profunda importancia histórica. Hace quinientos años, este tranquilo pueblo tuvo el honor de ser el lugar de retiro del renombrado emperador Carlos I de España, también conocido como Carlos V del Sacro Imperio Romano Germánico. Durante los últimos años de su reinado, Carlos I eligió este rincón pintoresco de la península para retirarse de las preocupaciones políticas y disfrutar de la serenidad del paisaje.

La elección de Garganta la Olla como retiro del emperador no es una coincidencia. Las vistas panorámicas de las montañas circundantes y el ambiente tranquilo y apacible se combinan para crear un entorno propicio para la reflexión y el descanso. No obstante, tal y como indican con humor los guías turísticos de la que fue su casa durante esos años: el Monasterio de San Jerónimo de Yuste, el emperador se llevó consigo tan solo un médico y dos cerveceros. Por lo que Carlos I no pasaba el tiempo rezando con los monjes, precisamente. Y es que esta región no solo invita al descanso y la relajación, sino también al regocijo: con comidas típicas como las migas con pimentón de la Vera o la caldereta de cabrito, acompañadas de vinos extremeños de gran calidad.

La leyenda de la Serrana de la Vera

¿Qué sería un pueblo sin una antigua leyenda que le acompañe? Como no podía ser de otra manera, la magia de Garganta la Olla proviene de la misteriosa leyenda de la Serrana de la Vera. Esta historia tradicional cuenta la historia de una figura mítica conocida como la Serrana de la Vera, un personaje femenino que es tanto temida como respetada por los lugareños. La leyenda se desarrolla en la zona cercana a Garganta la Olla y otras localidades de la comarca de La Vera.

La Serrana es descrita como una mujer hermosa y misteriosa que vive en las montañas y se la conoce por ser astuta y seductora, además de por sus intensas y peligrosas relaciones con los hombres que se aventuran a subir a la sierra. Según cuenta la leyenda la Serrana puede aparecer ante estos hombres bajo la forma de una bella mujer que les seduce y les lleva a su recóndita cueva. Una vez allí la Serrana revela su verdadera naturaleza: una criatura mitad humana y mitad animal, con garras y colmillos. Algunas versiones de la historia sugieren que la Serrana se alimenta de carne humana, mientras que otras enfatizan su carácter vengativo contra aquellos que han traicionado su confianza.

La leyenda se ha transmitido de generación en generación en la región, y ha influido en la cultura y la mentalidad de la zona de La Vera. Siendo una historia que se ha utilizado para advertir a los hombres sobre los peligros de aventurarse en las montañas solos y para expresar el respeto y la conexión que los lugareños sienten por la naturaleza y el entorno natural de la comarca. Asimismo, la leyenda ha inspirado obras literarias, musicales y artísticas que resaltan su misterio y su papel en la cultura local. La leyenda también ha atraído la atención de turistas y visitantes que desean explorar la riqueza cultural y folklórica del lugar.

Cómo Llegar

Este encantador municipio de Cáceres está conectado por carretera, autobús y tren a algunas de las ciudades más importantes del país. Para llegar en coche desde la capital, puedes tomar la autopista A-5 en dirección a Badajoz y luego desviarte por la carretera nacional N-110 hasta llegar a Garganta la Olla.

Si prefieres el transporte público, puedes optar por el autobús. Varias compañías de autobuses operan rutas desde Madrid a Garganta la Olla, con paradas en la estación de autobuses local. Por último, para llegar en tren, puedes tomar un tren de alta velocidad (AVE) desde Madrid hasta Plasencia, una ciudad cercana, y luego tomar un autobús o taxi hasta Garganta la Olla.