El tren, ya sea de media distancia o alta velocidad (AVE) es uno de los medios de transporte más demandados por los viajeros durante el verano. Esta manera de viajar nos permite llegar hasta un sinfín de lugares en un espacio muy reducidod de tiempo y, si somos capaces de conseguir ofertas, por un precio bastante razonable. Algunos de estos sitios son:

Sevilla

Dos horas y media aproximadamente es lo que tardaremos en llegar a la ciudad hispalense en AVE. Una vez allí solo nos queda disfrutar de sus monumentos, algunos de ellos declarados Patrimonio de la Humanidad como la Catedral, el Archivo de Indias y el Real Alcázar. A estos hay que sumar su gastronomía y todo su arte.

Catedral de Sevilla. Web Turismo Junta de Andalucía

Barcelona

El recorrido desde Madrid es de una duración similar. Por ello, y por otras muchas razones que descubrirás una vez llegues a la ciudad, no puedes perder la oportunidad de coger el primer tren y plantarte en la capital catalana. En ella tendrás tiempo de enamorarte de la Sagrada Familia, el Parque Güell, la casa Milá, el Parque Natural de Montseny, el Tibidabo...

La Sagrada Familia en Barcelona

Valencia

La capital del Turia reúne cada verano miles de visitantes llegados desde Madrid. De hecho, muchos madrileños consideran la provincia "la playa de Madrid".

Viajar hasta aquí en tren reduce tiempo y cansancio, ventajas ideales para una escapada de fin de semana. 

Una vez en la localidad, no puedes dejar de acudir a la Ciudad de las Artes y las Ciencias, al Bioparc, dar un paseo en barca por la Albufera o bañarte en cualquiera de sus playas.

Ciudad de las Ciencias y las Artes de Valencia. Turismo

Málaga

También dos horas y media es el tiempo que necesitarás para empezar a dejarte impresionar por su alcazaba, su teatro romano, su catedral o el Museo Picasso. Si quieres un plan un poco alternativo puedes realizar el emblemático Caminito del Rey o visitar algnos de los pueblecitos que se encuentran en la Costa del Sol.

Alcazaba Málaga

Córdoba

En menos de dos horas puedes estar en Córdoba. En ella caminar por su casco histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO  en 1994 y, por supuesto, visitar su mezquita, el Alcázar de los Reyes Cristianos, el Palacio de Viana o perderse por su judería.

Puente romano y mezquita de Córdoba

Zaragoza

Si quieres algo un poco más alejado de la costa, siempre puedes impregnarte del encanto maño de Zaragoza. En apenas hora y media estarás en la ciudad aragonesa para empezar a disfrutar de la imponente Plaza del Pilar, la catedral del Salvador o el Palacio de la Aljafería, delarada Patrimonio de la Humanidad.

Plaza del Pilar

León

León es otra gran opción para visitar en verano o en cualquier otra época del año. Desde luego, su arquitectura no deja indiferente a nadie, pero si queremos destacar otros aspectos en esta estupenda ciudad, hablemos de su gastronomía. Vinos de León y el Bierzo con una buena tapa y no necesitarás nada más.

Catedral de León