El turrón, el roscón de reyes, los langostinos y el jamón seguirán presentes en las cenas de Navidad. Como sucede cada año, los excesos siempre pasan factura cuando las fiestas tocan a su fin. El 7 de enero suele ser el día en el que los propósitos que se piden el primer día del año empiezan tomarse en serio, y es cuando los gimnasios comienzan a recibir clientes de forma masiva.

Además de los copiosos banquetes navideños, el picoteo entre horas de algunos snacks o incluso de chocolate o turrón no se le escaparán a nadie, aunque la intención final no sea engordar.

Desde ElPlural.com hemos querido realizar una lista de consejos para que, teniendo en cuenta las dificultades del reto, puedas apoyarte en una guía real, alejada de los topicazos que luego nadie cumple. Y hemos de reconocerlo, tampoco todos nosotros somos capaces de seguir al pie de la letra este recetario. 

1. Conoce tus excesos y ponle límites

Renunciar a ellos es imposible. Y más en fechas señaladas. No te has tirado toda la noche preparando canapés, platos para compartir y elaboraciones navideñas para amargarte más de la cuenta. Sin embargo, y teniendo en cuenta que todos los excesos son negativos, no es lo mismo sentir predilección por las gambas que por los patés. Tampoco lo es comer salmón ahumado que jamón curado. Elige bien: hay variedad y tu menú puede ser (un poco) menos calórico de lo que pensabas.

Fuera de los platos principales de cordero o pescado al horno, podría optarse, ya que es una vez al año, por una opción más saludable, e incluso vegana: ¿qué tal una ratatouille? Seguro que acompañada con la película de Disney los más pequeños de la casa se vuelven locos.

Imagen de una 'ratatouille'. Pixabay.

2. El ejercicio, que no falte

Puedes saltarte tu sesión de gimnasio o entrenamiento individual el día 25. Pero, mantener una rutina y no abandonarla siempre es positivo. No olvides el ejercicio: hay que mantener el cuerpo en movimiento. Para perder peso la mejor combinación es cardio tonificación. Otras actividades que te pueden ayudar son el body pump, el yoga o las sesiones online de cardio u otros ejercicios caseros, pero en menor intensidad si lo que quieres es perder peso.

3. Los días de fiesta se cuentan con los dedos de una mano

Nochebuena, Navidad, Nochevieja, Año Nuevo y Día de Reyes. Cinco días que se cuentan con la palma de una mano y que todos echamos en falta y empezamos a vislumbrar cada vez más cercanos. Cómete un par de bombones, disfruta de las cenas y las comidas, brinda con cava e incluso tómate un vino. 

Recuerda que este año deberán celebrarse con moderación y precaución ante el posible riesgo de contagio. ¡Pero no todo van a ser preocupaciones! Disfruta las fiestas con tus seres queridos más cercanos, siempre cumpliendo las normas sanitarias.

4. La otra cara de la moneda

Precisamente será en esos días con menos ajetreo y menos celebraciones en la agenda donde puedes aprovechar para compensar los excesos y seguir una dieta, aunque breve, más saludable. Realiza una dieta menos calórica de lo habitual, cena de forma ligera y trata de evitar el alcohol.

5. Evita los snacks y los dulces entre horas

El problema no suele estar tanto en las fechas fetiche del calendario. Todo apunta a que esos gramos o kilos de más pueden venir de las grandes comilonas familiares, ¡pero no es así! Esos momentos a escondidas en los que acudes a la nevera o a la despensa a picar algo son dañinos aunque parezcan inofensivos. Esta relajación, aunque siente muy bien en el momento, es dañina a largo plazo, por lo que echa el freno si tu objetivo es mantener la línea.

Los mantecados y polvorones son un dulce típicamente navideño

6. Cuidado con lo que bebes

Es el consejo más conocido de todos. Sí, te lo han dicho otras veces, y tenían razón. En estas fechas es aún más difícil contenerse ante el alcohol, pero como se pasará más tiempo todavía en casa, el consumo de alcohol en fiestas este año no será una amenaza que haga cambiar la dieta de uno. Pero, dentro de nuestras posibilidades, hay que tratar de no abusar. Si lo haces, engordarás. Ni dietas milagro ni recetarios mágicos sacados de Instagram te salvarán de ello. Nadie dijo que fuera fácil.

7. La mezcla ayuda

Sin embargo, ni el vino, ni el cava, ni la cerveza, son los verdaderos enemigos de estas fiestas, sino que son las bebidas azucaradas. Las mezclas de alcohol con refrescos, los típicos cubatas, no son un buen aliado de las dietas, por lo que lo más recomendable es que mezcles la ginebra, el ron o el whisky con agua o simples cubitos de hielo. Pequeños pasos para un gran objetivo. ¡Ánimo y felices fiestas!

Cerveza, imagen recurso. Fuente: Unplash