La encuesta de La Sexta da unos resultados muy ajustados pero favorables para el PSOE: el 47,5% de los ciudadanos sondeados desearían un nuevo triunfo electoral del PSOE, frente al 44,3% de los encuestados que preferirían una victoria del PP. Son porcentajes muy similares a los del anterior sondeo preelectoral dado a conocer por La Sexta un par de semanas atrás, cuando el 44% de los encuestados afirmaban preferir un nuevo triunfo del PSOE frente al 40% de quienes preferían una victoria del PP. No obstante, los resultados de estos dos últimos sondeos de La Sexta difieren por completo de los datos resultantes de todas las encuestas publicadas hasta ahora. Quizá la más reciente, la realizada por GESOP para El Periódico de Catalunya, no sólo vaticina un rotundo triunfo electoral del PP, que con el 46,1% de los votos alcanzaría una representación parlamentaria de entre 185 y 189 escaños, sino que también prevé una derrota contundente del PSOE, ya que con el 31,4% de los sufragios sólo sumaría entre 121 y 125 diputados. El mismo sondeo de El Periódico de Catalunya señala que el 42,5% de los encuestados prefiere a Mariano Rajoy como nuevo presidente del Gobierno, frente al 33,7% que preferirían que Alfredo Pérez Rubalcaba fuese quien sucediera a José Luis Rodríguez Zapatero.

Lo más sorprendente de los resultados de la última encuesta de La Sexta es que, aun siendo mayoría –repito, 47,5% frente al 44,3%- quienes prefieren una nueva victoria electoral del PSOE, el 45,9% afirma que el próximo 20-N piensa votar al PP y sólo el 35,3% piensan votar una candidatura socialista. Esto da un resultado electoral muy similar al del sondeo de GESOP para El Periódico de Catalunya, con una clara mayoría absoluta para el PP, que pasaría de sus actuales 154 escaños a entre 185 y 189, superando incluso la mayoría absoluta que con 183 diputados obtuvo José María Aznar en 2000, así como un espectacular retroceso del PSOE, que perdería casi medio centenar de sus diputados, ya que pasaría de los actuales 169 a entre 121 y 125, en lo que sería su peor resultado desde 1979. A destacar también otros datos relativamente coincidentes entre ambas encuestas: según La Sexta, el 87,9% prevé un triunfo del PP y sólo el 7,6% apuesta por una victoria del PSOE, mientras que según El Periódico de Catalunya el 83,5% apuesta por una victoria del PP frente a sólo el 9,5% que cree en un nuevo triunfo del PSOE.

Las conclusiones que se derivan de todos estos datos son evidentes. Todo apunta hacia un claro triunfo electoral del PP, pero existe ahora un amplio sector del electorado socialista tradicional que parece desconcertado, con una muy baja fidelidad de voto –el sondeo de GESOP para El Periódico de Catalunya apunta que es sólo del 58,3%, con el 21,7% que apunta a un cambio de voto, lo que deja la incógnita de lo que votará finalmente el 20% restante, si no opta por la abstención-, mientras que el PP mantiene una muy alta fidelidad de voto –la misma encuesta lo sitúa en el 90,7%, con sólo el 4,5% que apuesta por el cambio de voto. Ahí está el quid de la cuestión, en la fidelidad o infidelidad del voto. Si realmente es cierto, como indica la última encuesta de La Sexta, que “una mayoría de españoles –repito, el 47,5%, frente al 44,3%- preferiría una victoria del PSOE en las generales”, ¿por qué no puede producirse una nueva e inesperada victoria socialista en las próximas elecciones generales?

Querer es poder, pero para poder alcanzar lo que se quiere hay que ir a votar y votar lo que realmente se quiere.

Jordi García-Soler es periodista y analista política