Sin orden ni concierto, así está el Partido Popular. Con el norte perdido, así está Alberto Núñez Feijóo. Ni España se rompe ni los jóvenes son unos vagos. Por mucho que lo repita la derecha. Según el último CIS, la amnistía ocupa el lugar 24 entre las principales preocupaciones de los españoles, sólo le inquieta al 2,3% de la población. ¡A ver si algunos se enteran! Y lo de que el PP ponga en cuestión el esfuerzo de nuestros jóvenes demuestra su nulo interés, su desconocimiento y su total falta de respeto hacia ellos.

El PP nunca ha sido un partido para jóvenes, porque nunca ha impulsado políticas para ellos, porque nunca ha creído en ellos. Los datos son contundentes: Con gobiernos del PP se han alcanzado cifras históricas de paro juvenil con salarios miserables; se han recortado becas y cuantías provocando que miles de jóvenes tuvieran que abandonar sus estudios y siempre eliminaron cualquier ayuda que les facilitase el acceso a la vivienda.

Ni es tolerable ni es decente que la presidenta del PP en la Comunidad de Madrid afirme que a los jóvenes hay que inculcarle el trabajo y la perseverancia. ¿Sra. Ayuso cuando usted se mira en el espejo, de verdad no se le cae la cara de vergüenza por criticar de esta manera a los jóvenes? ¿Habla de esfuerzo quién como usted siendo muy joven, Esperanza Aguirre, la enchufó en un chiringuito cobrando más de 4.200 euros al mes y que, desde entonces ha vivido toda su vida de la política? ¿Habla de trabajo quién ha dedicado más tiempo a ocultar su curriculum académico que a estudiar?

¿Por qué el PP le falta el respeto a los jóvenes? ¿Por qué ni Feijóo ni nadie en el PP ha salido en tromba a criticar esta barbaridad de Ayuso? No lo hacen, porque el PP comparte sus palabras. Parémonos a pensar un poco. Feijóo, el que ha cobrado tres sueldos en el Senado, alcanzando hasta 14.750 euros mensuales; Moreno Bonilla, el que se ha subido un 19% el sueldo, aumentando su retribución en más de 15.000 euros anuales y Ayuso, la que quiere garantizarse un sueldo vitalicio de 8.500 euros brutos al mes cuando deje el cargo. ¿De verdad estos son los que vienen a dar lecciones de moral a nuestros jóvenes?

Pero si en el PP quieren hablar de los jóvenes, hablemos de los jóvenes, y de las nefastas políticas que el PP siempre ha desplegado hacia ellos. Empezando por el empleo. Con Mariano Rajoy, el mercado laboral juvenil era más precario, se recortaban contratos indefinidos, el paro juvenil era el doble que el actual y los salarios eran miserables, hasta el punto que hubo años en los que se negaron a subir el Salario Mínimo.

Esto cambia con la llegada al Gobierno de Pedro Sánchez. Gracias a su Reforma laboral hoy en España tenemos la tasa de paro juvenil más baja desde 2008, desde hace 15 años. Hoy 6 de cada 10 jóvenes que trabajan tienen un contrato indefinido y eso les da estabilidad en su vida. Y el Salario Mínimo, que perciben muchos jóvenes, ha subido un 54% en 5 años, alcanzando  los 1.134 euros. ¡Frente a la demagogia, realidades!

Pero hay otro gran problema que perjudica a los jóvenes y es la vivienda. La única política del PP en vivienda ha sido la especulación y el negocio del ladrillo. Lo primero que hizo Rajoy cuando gobernó fue eliminar el bono de alquiler que había en nuestro país. ¿Ya no nos acordamos de que durante esa época miles y miles de jóvenes tuvieron que volver a casa de sus padres porque no llegaban a fin de mes, sin trabajo y con la vivienda por las nubes? ¡Es bueno recordar!

El Gobierno de Pedro Sánchez ha aprobado una Ley de Vivienda, para garantizar el derecho a tenerla, para favorecer la emancipación de los jóvenes y también ha aprobado un Bono de Alquiler Joven por 400 millones de euros. ¿Y qué hacen las comunidades donde gobierna el PP? Hacen tres cosas. Se niegan a limitar el precio de los alquileres que siguen por las nubes, rechazan construir vivienda pública e impiden que las ayudas del Bono de Alquiler lleguen a los jóvenes. Tanto Ayuso como Moreno Bonilla son los que tienen una gestión más nefasta en esta materia. Ahora, cuando el gobierno de España se acaba de comprometer a destinar más recursos para el Bono de Alquiler Joven habría que exigirle a los presidentes y presidentas del PP que dejen de torpedear el futuro de nuestros jóvenes y arrimen el hombro.

También debemos hablar de educación. Con gobierno del PP se recortaron becas y cuantías, lo que provocó que 120.000 alumnos tuvieran que abandonar la universidad por falta de recursos económicos. Donde gobierna el PP se recorta la financiación de las universidades públicas, mientras surgen como setas las universidades privadas de dudosa calidad, pero que favorecen el negocio de unos pocos. No, el PP nunca ha creído en la igualdad de oportunidades de los jóvenes.

Frente a ello, destacar los 2.520 millones que el gobierno de Pedro Sánchez ha destinado a becas en 2023, la mayor cantidad en la historia, para que nadie se quede fuera de la universidad por falta de recursos económicos. Se ha aprobado la Ley de Ciencia a la que se suma el mayor presupuesto para I+D+i en nuestro país y también la resolución de una demanda histórica, que todos los becarios, también los que están en prácticas no remuneradas, puedan cotizar a la Seguridad Social desde el 1 de enero de 2024.

La prioridad es que los jóvenes tengan más oportunidades. Se debe seguir trabajando para mejorar la vida de los jóvenes. Es cierto que queda mucho por hacer, pero eso no puede ocultar la notable gestión que este gobierno y que este presidente ha hecho por ellos.

Y así discurre otra semana donde España no se rompe, pero los hechos sí rompen el discurso catastrofista de la derecha a la que todo le parece mal. Siempre se oponen, pero no sabemos qué proponen. Un PP que no tiene proyecto de país, porque es imposible tener un proyecto de futuro cuando se insulta a los jóvenes, llamándoles vagos. Antes de hacer tamañas acusaciones esos dirigentes deberían mirarse en el espejo.