No habla de "preocupante", "difícil", ''alarmarte''... como sería de esperar en los momentos actuales, en que las imágenes que han circulado por todo el mundo han sido las semejantes a una guerra civil protagonizada por unos manifestantes hartos ya de las mentiras y constantes recortes del gobierno y una policía desmadrada que pega brutalmente, a diestro y siniestro, sin mirar, recordando aquellos tiempos tan presentes en la memoria de muchos.

Momentos en que tantas familias se ven desahuciadas de sus hogares por no poder seguir pagando las hipotecas tan alegremente ofrecidas por las entidades bancarias en tiempos felices, los de la burbuja inmobiliaria que Aznar introdujo en España. Momentos en que los funcionarios, en sus distintas modalidades, ya no pueden seguir aguantando tantos recortes de sus salarios ni tanta infamia acerca de ellos. Momentos en que los pensionistas están a la espera de las migajas de una miserable e hipotética subida para seguir ayudando a los hijos que han tenido que regresar al hogar paterno por estar sin trabajo y sin dinero con que alimentar a la propia familia creada. Momentos en que los parados de larga duración están igualmente aguardando los 400 euros para echarse algo a la boca. Momentos tan trágicos en que el paro se dispara sin compasión. Momentos de indignación por el casi desmantelamiento de la Sanidad y Educación Públicas. Momentos en que los comedores sociales no pueden dar ya abasto. Momentos en que este Gobierno ha vulnerado prácticamente todos los artículos del Capítulo Segundo de nuestra Constitución, contraviniendo los derechos y libertades que tanto nos costó conseguir. Momentos en que se ha evidenciado ante la ciudadanía las mentiras del Gobierno y del partido que lo sustenta, el PP, para obtener fraudulentamente la victoria en las elecciones del 20-N. Momentos en que el mundo entero muestra las imágenes de una España transportada a tiempos pasados, que los más querríamos olvidar, tiempos de represión y hambruna... Rajoy, el hombre del puro, no tiene otra ocurrencia que calificar estos momentos como "fascinantes".

Puede seguir leyendo este artículo en el blog Pensamientos en Libertad