En Francia, Le Pen supera en expectativas de voto al mismísimo Sarkozy ante las elecciones presidenciales del próximo año. En Italia, el Gobierno de Berlusconi es títere de la xenófoba Liga Norte y promueve en el Senado la derogación de la ley que prohíbe la apología fascista. En Holanda, Bélgica, Suecia y Austria los nazis están instalados firmemente en las instituciones.
Y para completar el panorama, parece que el rival republicano de Obama en Estados Unidos puede ser Mike Huckabee, un ultraconservador creacionista que aplaude la famosa ley fascista de Arizona.