La caída de la cuarta entidad financiera del país, Bankia, ha dejado demasiados damnificados. Se ha protestado, se ha creado un clima de indignación y representantes sociales (15-M y UPyD) han presentado demandas que los jueces han comenzado a poner en marcha.

De esta forma vemos como en pocas semanas han comenzado a llevarse a cabo investigaciones sobre posibles casos de malversación y mil cosas más. Porque los señores que se hicieron la foto de la fusión junto a Rato  pasaron de decir que tenían unos beneficios de 304 millones de euros a necesitar un rescate de 23.465 millones.

Y de repente vemos a Rodrigo Rato, flamante vicepresidente del Gobierno con Aznar y expresidente del FMI, aplazando sus vacaciones para prestar declaración como imputado frente al magistrado de la Audiencia Nacional  Fernando Andreu.

Rato pasó por el FMI sin pena ni gloria, escapándose antes de finalizar su mandato.  Tenía un sueldo de 391.440 dólares más 70.070 dólares en gastos de representación. A estas partidas, denuncia Ernesto Ekaizer en el libro Indecentes hay que añadir un fondo de pensiones y una pensión vitalicia de 80.000 dólares anuales. Todo libre de impuestos”.

Sin embargo en octubre del 2007 abandona su cargo sin prever la crisis y habiendo respaldado todas las medidas financieras que nos llevaron donde estamos. Sin embargo, nada más aterrizar en Madrid, es fichado por Lazard, entidad que cotiza en la bolsa de Nueva York con un sueldo base de unos 2,7 millones de euros y más de 3 millones en bonus. Poco tiempo más tarde también firma contrato con el Banco de Santander con una remuneración de 200 mil euros anuales.

Pues bien, ahora deberá dedicar sus esfuerzos a preparar sus declaraciones ante el juez con el apoyo incondicional de su partido que se muestra indignado por las citadas imputaciones. Por cierto, el juez se ha olvidado de citar a Blesa, pieza clave de Caja Madrid.

Al mismo tiempo vemos que la Fiscalía de Barcelona ha abierto diligencias para investigar presuntas irregularidades en las retribuciones de altos cargos de la antigua cúpula de Caixa Catalunya, actualmente CatalunyaCaixa.

Se trata de aclarar si se produjeron anomalías "en el establecimiento de un régimen de retribuciones elevado para altos responsables" de la citada caja, actualmente controlada por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).

Fuentes de la Fiscalía de Barcelona han explicado que la investigación se ha abierto de oficio tras conocer por los medios públicos las elevadas cuantías de retribuciones, pensiones vitalicias e indemnizaciones de algunos de los responsables de la entidad bancaria. Aquí también han funcionado las denuncias.

El fiscal superior de Galicia, Carlos Varela, ha presentado una demanda  contra Novagalicia Banco (NGB) por la venta de participaciones preferentes y solicita que se condene a la entidad por "prácticas abusivas”.

Varela ha advertido que se vendió este producto a personas "analfabetas, discapacitadas e incluso menores a través de las figuras de un tutor", casos que han sido derivados a la vía penal por si se produjo falsedad documental.

En la elaboración de dicha demanda  se han analizado contratos aportados por el Instituto Galego de Consumo, por la Fiscalía de Pontevedra, que abrió diligencias informativas el pasado mes de febrero, y por la Asociación de Consumidores de Banca (Adicae).

Afortunadamente también gracias a las denuncias nos hemos podido enterar de la escandalosa declaración que escuchó hace unos días el juez Vicente Ríos en Valencia. Al preguntarle al exjefe de Explotación de la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar) sobre la contabilidad de dicha empresa  éste le respondió que “la contabilidad de una empresa es secreta”. Al parecer Epsar se dedicaba a dar cantidades millonarias cada año a Emarsa, empresa municipal que gestiona 460 depuradoras valencianas, sin ningún tipo de control.

Durante la instrucción, el juez Ríos ha estimado que el saqueo de Emarsa, a base de sobrecostes y facturas falsas, ha dejado un agujero económico de más de 25 millones de euros. Y la alcaldesa, máxima responsable de dicha empresa municipal,  sigue sin pronunciarse sobre el tema. Su prepotencia no se lo permite. Rodeada de imputados y abandonada por el PP de Madrid, vive sus últimos años en la Alcaldía intentando zafarse de los problemas, como la declaración judicial que van a prestar esta semana una docena de altos cargos valencianos por  los escándalos Urdangarin, CAM y Gürtel. Su entorno.

No sabemos si éstos individuos habrán visto el demoledor reportaje que el lunes pasado publicaba en su edición digital el New York Times hablando de la fracasada Ciudad de la Luz (estudios de cine en Alicante)  poniéndola como ejemplo del "frenesí valenciano por la construcción de  grandes instalaciones, que ha dejado un legado de 25.000 millones de dólares e infraestructuras en bancarrota".

Por último me gustaría resaltar como gracias a la numerosísima documentación procedente de ciudadanos enviada a la  Fiscalía Anticorrupción, ésta está pudiendo demostrar  una cadena de irregularidades con las que el miembro del PP, ex Presidente de la Diputación  y  gran cacique de la provincia de Orense, José Luis Baltar ha acumulado un importante patrimonio personal. Pero el arrogante Baltar pasa de todo y cuando le preguntan los periodistas sobre sus irregularidades, él contesta: “El que ríe el último ríe dos veces".

Seguiremos informando……y denunciando

Mercè Rivas Torres es periodista y analista político