La Junta Municipal de Moncloa-Aravaca ha decidido construir una escultura en recuerdo de Lucrecia Pérez, la primera víctima de xenofobia reconocida oficialmente como tal en España, a pocos días que se conmemore el trigésimo aniversario de su asesinato, que ocurrió el 13 de noviembre de 1992. En los últimos años, en Madrid, ya se habían instalado una placa y una glorieta conmemorativas de la memoria de Lucrecia Pérez.

El asesinato de Lucrecia Pérez se produjo a raíz de que un grupo del vecindario de Aravaca estereotipara al colectivo dominicano. La tensión se convirtió en conflicto con la comunidad inmigrante, y el 1 de noviembre de 1992 se produjo una lucha entre Policía Municipal e inmigrantes, con cinco heridos y ocho vehículos dañados. Doscientas mujeres dominicanas reunidas en la plaza de Aravaca apedrearon a la Policía Municipal cuando quería introducir en el coche a dos de ellas, que carecían de permiso legal de residencia en España.

Sobre las nueve de la noche del viernes 13 de noviembre, cuatro enmascarados vestidos con ropa negra penetraron en la antigua discoteca Four Roses, en la carretera de La Coruña, en el distrito de Aravaca. Allí se refugiaban personas sin hogar".

Los asaltantes dispararon indiscriminadamente contra los dominicanos que cenaban a la luz de una. Lucrecia Pérez, de 33 años, que había llegado a España un mes y tres días antes, recibió dos tiros, uno de ellos en el corazón e ingresó muerta en el hospital. El otro herido grave fue Augusto César Vargas.

Un guardia civil de 25 años ejecutó los disparos que acabaron con la vida de Lucrecia. Con él iban tres jóvenes, de 16 años. Un grupo de extrema derecha había organizado el atentado.