Data for Road Safety es una iniciativa europea que une a fabricantes de automóviles (Audi AG, BMW AG, Ford Smart Mobility Ltd, Mercedes Benz AG, Volvo Cars y Scania), proveedores de servicios de información de tráfico y autoridades de tráfico vial de Europa (de Reino Unido, Bélgica, Luxemburgo, Alemania, Austria, Holanda y Finlandia), que, con el respaldo de la Comisión Europea, comparten e intercambian datos de seguridad para hacer las carreteras más seguras. El Gobierno de España se ha unido también a la propuesta, a través de la Dirección General de Tráfico (DGT).

El proyecto parte de la premisa de que la conectividad entre vehículos y gestores del tráfico permitirá a los conductores conocer posibles incidencias en sus desplazamientos. Para compartir la información, los miembros del grupo han creado un ecosistema, SRTI, donde los datos anonimizados que se intercambien aumentarán la seguridad de los conductores, al contribuir en la toma de decisiones durante la conducción.

Entre junio de 2019 y octubre de 2020 se ha realizado una primera demostración del funcionamiento de este ecosistema, publicando decenas de millones de mensajes. Los vehículos demostraron que son capaces de producir datos para cinco de las ocho categorías de la prueba de concepto establecidas en el Reglamento 886/2013 de la Unión Europea: zona de accidentes sin protección, vehículo averiado, carretera resbaladiza por temporal, visibilidad reducida y condiciones meteorológicas excepcionales.

En España, la DGT ha desarrollado una plataforma IoT que permite la interconexión entre todos los actores que forman parte del ecosistema de tráfico y movilidad: DGT 3.0, que ofrece un punto de acceso de información gratuita en tiempo real sobre lo que está sucediendo en las carreteras del territorio nacional.