Malos tiempos para el pobre Zuckerberg. Quién se lo iba a decir hace algunos años, cuando era una especie de estrella del rock de bajísima intensidad. Su ascenso a lomos del invento más ingenioso de principios de siglo. Facebook lo cambió todo.
Pero el cambio llegó demasiado lejos. Es lo que concluye un informe del Parlamento Británico. En el documento se asegura, con la forma directa y descriptiva de los ingleses, que la compañía se comportó como “gangsters digitales”. Todo a causa de la forma en la que Facebook contribuyó a la expansión de fake news y cómo comerció sin escrúpulos con los datos de cientos de millones de personas.
Anuncios oscuros
Tan grave es su actitud, juzgan los parlamentarios británicos, que ha puesto en riesgo la democracia. La forma de segmentar a la población y dirigirle mensaje manipulados a aquellos más proclives a creerlos. Y, claro, hablando de redes sociales, a compartirlos.
Es lo que se denomina “darks adverts”, “anuncios oscuros”. Información y publicidad de la que no se conoce la procedencia real. Ni cuáles son los objetivos de esos desconocidos emisores.
El informe apunta directamente a Mark Zuckerberg. Culpa al fundador de la compañía de ignorar varias demandas y quejas que le advertían sobre la ilegalidad de sus actuaciones. También de permitir y fomentar la intervención rusa que busca desestabilizar las democracias occidentales.
Además, los parlamentarios exigen la creación de una comisión de investigación que analice la influencia extranjera en elecciones tan transcendentales como el referéndum de independencia de Escocia, las elecciones europeas de 2016 o el Brexit.
