Una nueva investigación genética revela que la marihuana tiene sus raíces en lo que hoy es el Noroeste de China, donde las cepas locales se parecen más a la cepa original de cannabis que se cultivó hace más de 12.000 años.
El estudio, el más grande de todos los que se han realizado en torno a genomas de las plantas de cannabis, agrega 82 genomas más a los 28 que ya se habían secuenciado, y muestra que el cannabis se cultivó por primera vez, probablemente, a principios del Neolítico y en la región de la China moderna, cerca de la frontera con Kazajstán y Kirguistán, y desde allí se expandió, en diferentes variedades, por todo el mundo.
Debido a que las plantas de cannabis están tan extendidas ahora, existe un considerable debate científico acerca de su origen, y las hipótesis incluyen Asia occidental, Asia central y el Norte de China, dijo Fumagalli. Este nuevo estudio muestra que las plantas de cannabis de Asia Central pertenecían a la variedad de cáñamo, lo que significa que son plantas altas y no ramificadas con tallos ricos en celulosa, adecuadas para producir fibras para cuerdas y textiles. No eran del tipo llamado basal, que son adecuados tanto para la producción de fibra como para producir efectos psicoactivos.