Es algo que no nos cansaremos de denunciar. Porque en muchas ocasiones, la mejor forma de poner algo en primera plana es justamente informar de ello cada vez que ocurra. Cada vez que un animal marino muera por culpa del plástico que contamina los océanos, aquí podrás leerlo.
70 centímetros de coche
Las últimas víctimas, hasta la fecha, han sido nada menos que trece cachalotes que aparecieron varados en una playa alemana del Mar del Norte. Realmente, los animales parecieron a finales de este mes de enero, pero ahora se han hecho públicos los resultados de la necropsia que se realizó a alguno de ellos.
Y lo que los forenses encontraron en su interior no es una sorpresa: plástico. La mayoría de los estómagos de los cetáceos contenían distintos objetos de este material. Uno de ellos presentaba en su tracto digestivo una red de 13 metros. Otro una pieza de coche de más de 70 centímetros.
Ejemplares jóvenes
Así sigue la relación que, según los científicos que analizaron a los animales, arroja un saldo de cuatro de trece cachalotes con grandes cantidades de plástico en su estómago. Un volumen de material que o bien hacía muy difícil la vida para los animales o, directamente, les causó la muerte.
Los científicos no tienen duda a este respecto. Los trece cachalotes que fueron a morir a la playa de Schleswig-Holstein eran machos jóvenes, de entre 10 a 15 años, con un peso de 12 a 18 toneladas. Animales fuertes y potentes, en plan maduración, derribados por piezas de plástico como restos afilados de cubos y cajas.
