Debió ser todo un espectáculo. Si no fuera porque se trata del mayor cataclismo en millones de años. Ahora han sido descubiertos los restos de los primeros espectadores. Los primeros dinosaurios que murieron tras el impacto de Chicxulub.

El hallazgo ha sido realizado por un equipo de la Universidad de Kansas. El yacimiento de huesos carbonizados y fosilizados se ubica en las montañas de Dakota del Norte. Una localización relativamente cercana al lugar del impacto: la península del Yucatán.

El entorno hace 65 millones de años era idílico para las especies que allí vivían. Un caudaloso río serpenteaba por el valle creando un espacio verde en el que cientos de especies tenían su hábitat. Hasta aquella tarde en la que vieron el cielo arder.

Lluvia de perlas mortales

Los animales terrestres se cree que fueron carbonizados en segundos cuando se incendió la atmósfera por efecto de la fricción del asteroide y del calor generado en el impacto. Los animales acuáticos tuvieron una suerte distinta.

Los científicos han hallado perlas de vidrio en las branquias de los fósiles acuáticos. En el momento de la caída de la enorme roca sobre el agua, millones de toneladas de roca se fundieron y enfriaron rápidamente en su ir y venir por la atmósfera. Esto generó diminutas bolitas de vidrio. Al caer al agua, se alojaron en las branquias de los peces, asfixiándolos en segundos.

Pero eso no fue todo. Por si alguien había quedado con vida, durante los siguientes veinte minutos continuó la caída de bolas de vidrio y restos de rocas incandescentes. Para inmediatamente después sufrir la llegada de una ola gigante que cubrió la zona de sedimentos y restos que el agua había llevado en su arrastre.

Seis años de trabajo ha llevado al equipo desenterrar el suficiente número de fósiles y el análisis de los sedimentos para llegar a las conclusiones que ahora exponen.