Pantalla táctil y una placa con ranuras que se activan para formar trece líneas de texto en braille. Es la tableta Blitab, una revolucionaria herramienta que facilita que, por primera vez, personas ciegas puedan navegar por la red, y reciba una traducción rápida de los contenidos.

Hasta ahora, los invidentes solo podían navegar por Internet por medio de sistemas de audio o teclados táctiles caros y muy limitados (solo cinco palabras a la vez). Esta innovación de la ingeniera búlgara Kristina Tsvetanova, reconocida por el Rising Innovation Award de la Comisión Europea entre otras instituciones, traduce el contenido de una web (y otros formatos como documentos de texto) a su pantalla metálica formada por trece líneas con agujeros, que se activan gracias a un innovador sistema de membranas y fluidos creado por Tsvetanova.

El sistema, por ahora solo disponible en inglés, además de navegar, permite escribir y leer textos (como un libro electrónico), funciona con sistema operativo Android y ha tardado tres años en desarrollarse. Tsvetanova, cuya empresa está radicada en Austria pero pasa la mayor parte en Estados Unidos, se dio cuenta de la necesidad de este dispositivo cuando un compañero ciego le pidió que le apuntara a una clase en Internet porque no podía hacerlo solo.

El prototipo final ha tardado cuatro años en ver la luz, y aunque Tsvetanova quiere que esté disponible a final de año -a un precio de 500 euros (579 dólares)-, el proyecto se encuentra inmerso en una ronda de financiación y todavía no tiene fecha fija de lanzamiento. En todo caso, incrementará las posibilidades de formación de las personas con discapacidad visual, que la Organización Mundial de la Salud estima en 253 millones de personas: “Este dispositivo puede marcar la diferencia en la alfabetización de las personas con problemas de visión”, subraya.