Gracias al programa de Ayuda para el Diagnóstico de una Infección Respiratoria Aguda (ARIDA), impulsado por UNICEF y con la colaboración de la Fundación “la Caixa”, se ha conseguido mejorar el diagnóstico y el tratamiento de la neumonía de 1,5 millones de niños y niñas. Esta enfermedad es una de las principales causas de mortalidad infantil en países como África, Asia y América Latina.

La neumonía es una de las principales causas de mortalidad infantil en niños y niñas menores de 5 años. Cada 39 segundos muere un niño a causa de esta enfermedad, siendo 800.000 muertes anuales.

El problema de esta afección es que a pesar de ser prevenible, tratable y curable, no hay herramientas necesarias en los sistemas sanitarios para diagnosticarlo ni erradicarlo.

Este problema se agrava cuando ciertos lugares tienen un acceso limitado en hospitales o se encuentran demasiado lejos. En estas zonas, el papel de los agentes sanitarios es clave. Por ello, necesitan tener a su disposición herramientas adecuadas para erradicar las enfermedades de forma correcta y temprana.

Los agentes de salud cuentan las respiraciones por minuto para identificar esta afección. Un método impreciso que puede ocasionar diagnósticos erróneos.

Para resolver esta enfermedad, UNICEF – que lleva trabajando desde 2015 con la Fundación “la Caixa” – ha impulsado el programa ARIDA con el fin de mejorar el diagnóstico y tratamiento de la neumonía en países como África, Asia y América Latina.

Resultados

Para el proyecto se han desarrollado dispositivos electrónicos portátiles que ayudan al diagnóstico de la neumonía en niños y niñas.

Una de las herramientas es el dispositivo ChARM, que se pone alrededor del torso de los niños para contar la frecuencia respiratoria por minuto. También está el dispositivo Rad-G, que tiene una doble función: medir la frecuencia respiratoria por minuto y el nivel de oxígeno en sangre. Ambos son claves para la detención de esta enfermedad.

Hasta el momento, más de 1,5 millones de niños y niñas se han beneficiado del tratamiento. Gracias al proyecto ARIDA, muchos niños tienen un sistema de salud más fuerte, con personal sanitario más formado y mejores herramientas para identificar y frenar la enfermedad.

Cerca de 1,3 millones de niños y niñas han tenido acceso a antibióticos para la neumonía en Mozambique, Etiopía, Sierra Leona y Zimbabue. Asimismo, 308.000 han visto mejorado la atención sanitaria.

En total, 6.175 agentes de salud han recibido formación y material para utilizar los dispositivos en Bolivia, Etiopía y Nepal.