A través del programa Los Gipsy Kings conocíamos a la familia Montoya. Sin embargo, la diseñadora Saray Montoya ha provocado un gran revuelo en Twitter después de subir unos vídeos a su cuenta de Instagram en los que denuncia que ha sido apuñalada por su suegro y su cuñado.

En uno de los vídeos grabados desde el propio hospital, la afectada explicaba que el ataque se ha producido a raíz de una disputa entre hermanos. "Ellos siempre me han tenido mucha envidia", cuenta Montoya entre lágrimas narrando posteriormente: "Me han dado cinco puñaladas en la espalda, cinco en el brazo, dos en la pierna y una en la cabeza".

Junto al vídeo del hospital, en el que la exconcursante de Supervivientes 2018 aclara lo sucedido, ha publicado una serie de imágenes en las que se puede ver la sangre por el suelo y las paredes del lugar de la agresión. "Saray Montoya y su hija Naiara Rubio Montoya han sido apuñaladas por Nicolás Rubio Salguero, Nicolás Rubio Silva, padre e hijo están en paradero desconocido. La policía los está buscando", se puede leer en la publicación.

Posteriormente, Saray Montoya, ya desde su domicilio más calmada, ha querido explicar en detalle lo ocurrido con otro post. "A mi niña le han pegado una puñalada en el pecho", ha contado esta que considera que han intentado hacer daño a su marido atacándola a ella y a su hija.  

La diseñadora ha explicado que aprovecharon la ausencia de su marido para atacarlas.  "No nos ha dado tiempo de nada. Había cuatro hombres", ha comentado mientras añadía que dos de ellos eran el hermano de su marido y su suegro. También ha contado que su madre y una prima se han visto afectadas por el altercado.

Finalmente, esta ha asegurado que la Policía ya les está buscando y que va a ir hasta el final porque "a mí no me importa que me maten, pero a mi hija no", ha expresado en el vídeo. En una intervención en el programa Viva la Vida, Saray ha confesado que el desencadenante fue una disputa sobre el coronavirus, pero cree que el problema viene de más atrás ya que nunca la han querido en su familia.

La exsuperviviente considera que, aunque van a regresar, "la gente va a saber quién ha sido y se va a hacer justicia", afirma diciendo que cree en la justicia y que no se toma la venganza por su mano.