La semana pasada, el conde Lequio confesó en El programa de Ana Rosa una anécdota sobre Juan Carlos I que vivió siendo un adolescente. Durante la emisión del programa, el ex de Ana Obregón señaló que estando en su casa un día sonó el teléfono y al cogerlo escuchó la voz de Juan Carlos I: "Empecé a escucharle llorar como nunca por la novia que tenía en ese momento".

El propio Lequio se atrevió a poner nombre a dicha amante: Barbara Rey. Según él, "el rey se enamoraba como un loco" además de que "lloraba como un niño. Ni yo lloraba así en esa época", exclamó.

Esta historia sirve para recordar otras acusaciones que no dejan en buen lugar a quien fuera rey de España. De "hijo" de Franco, a "depredador sexual".

Una persona que ha conocido realmente bien al emérito es su examante Corinna zu Sayn-Wittgenstein, quien, en los últimos meses, ha contado muchas intimidades de Juan Carlos de Borbón a raíz del escándalo judicial en el que están inmersos en Suiza.

Entre las intimidades más interesantes, destaca su relación con el dictador Francisco Franco. Según cuenta Corinna, Juan Carlos le reveló que se sentía “como una pelota de ping pong entre su familia y el dictador”. Larsen recuerda cómo el exmonarca le guió hasta un monasterio en el que le “educaron muy austeramente” y le explicó que “sufría sentimientos de abandono porque no había estado con su familia”.

Larsen subraya que la relación entre Francisco Franco y Juan Carlos I era de “padre e hijo”. “Cuando eres tan joven y te educa este hombre, te transmite muchos valores y hasta cierto punto estos perviven en una persona”.

También Corinna ha hablado repetidamente sobre los presuntos 65 millones que le regaló Juan Carlos,  un "regalo generoso" porque era "muy inflexible a la hora de cuidar de ella". Además, ha añadido que "no fue algo excesivo", así como que Juan Carlos "es el arquitecto de sus problemas".

Sobre el millonario regalo, Corinna lo analiza así: "Cuando finalmente llegó el regalo, obviamente me sorprendió porque era una suma muy generosa". Sin embargo, para ella  "en el contexto de un patrimonio neto estimado por Forbes en alrededor de 1.800 millones, no es una cantidad de dinero irrazonable".

Sin embargo, una de las afirmaciones más graves lanzadas contra Juan Carlos I se ha lanzado en una entrevista en ElPlural.comAmadeo Martínez Inglés, coronel retirado del Ejército, le definió como "un depredador sexual de tomo y lomo". "Yo me he permitido cuantificar el número de hijos naturales de este Borbón en 20", añadió. 

"Un señor que solo vive para el sexo, a diario y a todas horas, abusando de su estatus real para que sus “celestinos palaciegos” le provean de mujeres de toda clase y condición en el marco de juergas programadas en todo el territorio nacional y en países extranjeros pagadas con el dinero de todos los españoles, es un depredador sexual de tomo y lomo", sentenció Martínez Inglés.

Otro de los personajes que más ha atacado en España al padre de Felipe VI es el periodista Federico Jiménez Losantos. Este 19 de septiembre dejó unas inquietantes declaraciones sobre unos supuestos vídeos comprometidos que tenía el régimen comunista rumano: "Cuando fusilarón a los Ceaușescu se tuvo que plantar ahí Perote, que era el agente operativo del CSIC, a rescatar todos los vídeos. No solo del campechano, del campechano, de Carrillo y de todos los que habían estado ahí cazando las moscas que usted sabe y se imagina. Y los moscos, que había de todo, moscas, moscardones, algún avispón, una avispita graciosa... En fin, había de todo. Tenía 3.000 vídeos Elena Ceaușescu. Perote rescató 100, previo pago de su importe. Son así", relató.

Por otra parte, el periodista de Orihuel del Tremedal llegó a señalar una supuesta adicción de Juan Carlos: "Le gusta el drinking como al padre, al abuelo, a la abuela, al bisabuelo, bisabuela, así hasta Alfonso XII, que murió en el 'acto'".

Toda una serie de improperios que distan mucho de la imagen de Padre de la Constitución que se ha vendido de Juan Carlos I en España.