El reciente anuncio italiano de Correos ha conmovido a su población en plena navidad. Este anuncio trata así de Filippo, un niño que acompañado por sus padres acude a una oficina de Correos donde entrega un paquete en el mostrador en el que la dirección es el cielo, donde descansa su abuelo fallecido.
Ese paquete contenía los objetos personales del abuelo del niño, de ahí la intención del menor de mandar el paquete al cielo. Se observa como el niño recoge unos guantes, unas gafas, una foto entre otras cosas, todas relacionadas con su abuelo, lo que refleja así el enorme vínculo que compartía con él.
El anuncio se grabó en la ciudad de Puglia, situada entre las localidades de Monopoli y Lecce, lo que hace que los paisajes mediterráneos destaquen dentro del marco del emotivo anuncio. A su vez, de fondo, se escucha ‘La será dei miracoli’ de Lucio Dalla, lo que acompaña al niño a la oficina de Correos con un tono ciertamente melancólico.
Lejos de lo que es la intención principal de la publicidad, a través de este anuncio, observamos el debate sobre el poder emocional que tiene esta en un segundo plano. Se observa como a través de este medio se puede narrar con cierta capacidad temas sensibles como son el duelo y la memoria familiar.
Al inicio de este vídeo observamos escenas de la vida familiar navideña dentro de la casa de Filippo, como es el árbol de Navidad encendido, a los padres del niño haciendo galletas o a los animales de la casa. Todo comienza cuando Filippo observa a unos trabajadores desde su balcón los cuales están trabajado para colgar las luces de navidad. Desde ese momento, el niño comienza a recopilar cosas de su abuelo guardándolas en el paquete que más tarde trasladaría a la oficina de Correos acompañado por sus padres.
“Via delle Nuvole, 6. Cielo”, es la dirección que la trabajadora de correos lee tras el mostrador, la cual mira al niño con una sonrisa en la cara. “Bravo Filippo. Buon Natale”, le decía la trabajadora de Correos al niño después de leer la dirección del paquete. Ese breve intercambio resume el espíritu del anuncio, la empatía a través de actos simples, en especial dentro de las fechas navideñas donde se tiene por costumbre reunirse con la familia.
La historia de Filippo no solo celebra la Navidad, sino que recuerda a todos los espectadores la importancia de mantener vivos los recuerdos y honrar a quienes ya no están, en especial en estas fechas.
Además, el anuncio juega con la imagen de un niño, el cuál esta procesando un duelo importante, el fallecimiento de su abuelo. Muestra por tanto la importancia de los vínculos familiares, enseñando a los adultos a valorar los pequeños gestos. El cotidiano gesto, en la actualidad, de enviar un paquete a través de Correos viene cargado de un profundo significado emocional.