La escena se está convirtiendo en algo habitual. Tanto, que casi da miedo. Alguien se te acerca [amistad, familiar, o simplemente alguien a quien conoces] y te empieza a hablar de las maravillas de las criptomonedas y cómo te puedes “forrar” si inviertes ahora. Tan es así, que todos los reguladores europeos y los españoles han decidido advertir a la ciudadanía de sus peligros. 

“Muchos criptoactivos revisten un carácter muy arriesgado y especulativo. Igualmente, no resultan adecuados como inversión ni como medio de pago o intercambio para la mayoría de consumidores minoristas”, explican las autoridades europeas de supervisión [ESA, por sus siglas en inglés, que incluye a la Autoridad Bancaria Europea, la Autoridad Europea de Valores y Mercados y la Autoridad Europea de Pensiones y Seguros de Jubilación]. 

Muchos de estos productos revisten un carácter muy arriesgado y especulativo

Incremento de la actividad

Por eso, las ESA han expresado su preocupación ante “el aumento de la actividad y el interés de los consumidores en los criptoactivos, en particular en las denominadas monedas virtuales, y la aparición de nuevos tipos de ellos y productos y servicios relacionados, como los NFT (tokens no fungibles), los derivados con ellos como activos subyacentes, las pólizas de seguros de vida vinculadas a fondos de inversión con criptoactivos como activos subyacentes y las aplicaciones de finanzas descentralizadas (DeFi), que aseguran generar una rentabilidad elevada o rápida”. 

Sobre todo, porque un número cada vez mayor de personas los adquieren “con la expectativa de obtener una buena rentabilidad sin ser conscientes de los elevados riesgos que ello conlleva”.

En España, la CNMV, el Banco de España y la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones “suscriben el contenido de esta advertencia y comparten la valoración de los riesgos que se identifican en la misma”. 

Los consumidores se enfrentan a la posibilidad real de perder todo el dinero invertido si compran estos activos

Publicidad engañosa

Las ESA advierten de que “los consumidores se enfrentan a la posibilidad real de perder todo el dinero invertido si compran estos activos y deben estar atentos a los riesgos derivados de la publicidad engañosa”. Y señalan como especialmente peligrosas las recomendaciones realizadas “ a través de las redes sociales y por los influencers”. 

Una clave para descubrir posibles fraudes son “las promesas de una rentabilidad alta o rápida, especialmente aquellas que parecen demasiado buenas para ser ciertas”, antes las que hay que ser “particularmente cautelosos”. 

El problema se agrava si tenemos en cuenta que no hay defensa posible: “Los consumidores deben ser conscientes de la falta de procedimientos para poder reclamar, así como de la ausencia de protección, ya que los criptoactivos y los productos y servicios relacionados con ellos en general quedan fuera de la protección que ofrecen las normas vigentes en la Unión Europea sobre servicios financieros”.

Algunos de estos productos se anuncian de manera agresiva, incluso con información deliberadamente engañosa

Riesgos

Entre los principales riesgos, las ESA señalan en primer lugar las “fluctuaciones extremas de precios”, que además son “repentinas” y “tienen un carácter especulativo, ya que su precio a menudo se basa exclusivamente en la demanda de los consumidores (es decir, puede no haber un activo que lo respalde u otro valor tangible)”. Esa característica hace que “no sean adecuados como reserva de valor ni como medio de intercambio o de pago”.

Las autoridades también advierten de que suelen ofrecerse con datos poco fiables: “algunos criptoactivos y productos relacionados se anuncian al público de manera agresiva, utilizando material comercial y otra información que puede resultar poco clara, incompleta, inexacta o incluso deliberadamente engañosa”.

Aparte de la ya mencionada falta de protección a la hora de reclamar, otro aspecto que hace poco recomendables estas inversiones es la complejidad de los productos, hasta el punto de que “ a veces, tienen características que pueden incrementar la magnitud de las pérdidas si se producen fluctuaciones de precios adversas. Dada su complejidad, estos productos no son adecuados para muchos consumidores”. 

En muchos casos, se trata directamente de fraude y actividades maliciosas, que forman parte de estafas y de engaños para perpetrar delitos como el phising

Las ESA apuntan a la “manipulación del mercado, falta de transparencia de precios y escasa liquidez”, como otra fuente de riesgo: “es posible que no obtengas un precio o trato justo al comprar o vender criptoactivos, o que no puedas venderlos con la rapidez que desearías en ausencia de un posible comprador. Se han notificado casos de manipulación del mercado en múltiples ocasiones”.

Por último, señalan los riesgos relacionados con las tecnología: “Varios emisores y proveedores de servicios de criptoactivos, en particular los proveedores de intercambio y monederos electrónicos, han sufrido ciberataques y graves problemas operativos. Muchos consumidores han perdido sus criptoactivos o han sufrido pérdidas por este tipo de ataques e interrupciones del servicio o por haber perdido las claves privadas con las que acceden a sus activos”.


¿Qué debes saber, según las ESA?

Debes conocer los riesgos específicos asociados a los criptoactivos y a los productos y servicios relacionados con ellos, y sopesar detenidamente si los riesgos son aceptables atendiendo a tus preferencias personales y a tu propia situación financiera. Entre estos riesgos destacan los siguientes:  

  • puedes perder todo el dinero que has invertido
  • los precios pueden bajar y subir rápidamente en breves períodos
  • puedes ser víctima de estafas, fraudes, errores operativos o ciberataques
  • Y es poco probable que tengas derechos de protección o compensación si algo va mal. 

Si estás pensando en comprarlos o productos y servicios relacionados con ellos, debes preguntarte lo siguiente:  

  • ¿puedes permitirte perder todo el dinero que has invertido?
  • ¿estás dispuesto a asumir grandes riesgos para obtener la rentabilidad anunciada?
  • ¿entiendes sus características y las de los productos y servicios conexos?  
  • ¿tienen buena reputación las empresas/partes con las que tratas?  
  • ¿las empresas/partes con las que tratas figuran en la lista negra de advertencias de las autoridades nacionales competentes?
  • ¿puedes proteger eficazmente los dispositivos que utilizas para comprarlos, almacenarlos o transferirlos, en particular tus claves privadas?