Tras semana y media de batallas fiscales, que inauguró Andalucía siguiendo la estela de Madrid, la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, salía al paso este jueves con una batería de medidas para atajar la carrera a la baja por los impuestos que varias autonomías ya se planteaban correr. Un paquete de medidas que incluyen varias modificaciones en los gravámenes actuales y que entrará en vigor a partir del 1 de enero.

Estas medidas para la justicia social y la eficiencia económica persiguen garantizar la cohesión social y luchar contra la inflación. Con esta reforma, el Ejecutivo pretende implementar unas medidas fiscales que favorezcan la distribución contributiva y la justicia social, evitando que la clase media y trabajadora cargue con las consecuencias de la crisis, en línea con lo que proponen los organismos europeos. Ya desde el inicio de la legislatura, el Ejecutivo ha venido implementando una fiscalidad para una mayoría social con medidas como la rebaja del IVA de la electricidad, del gas y otras energías, la rebaja del IVA en las mascarillas quirúrgicas o el 0% de IVA en la importación de material sanitario.

En su plan de redistribución fiscal, el Gobierno tampoco se ha olvidado de las medidas dirigidas a grandes empresas y patrimonios como el aumento de tres puntos en el IRPF para rentas de capital superiores a 200.000 euros, la fijación de un tipo mínimo del 15% en el Impuesto de Sociedades, el impuesto temporal a la banca y las energéticas y los impuestos sobre transacciones y servicios digitales.

Las nuevas medidas del Ejecutivo se apoyan en cuatro ejes principales: el impuesto de solidaridad de las grandes fortunas, cambios en los tramos del IRPF, modificaciones en el Impuesto sobre Sociedades y el llamado “impuesto rosa” sobre la bajada del IVA en productos de higiene femenina que se incluirá también en los Presupuestos Generales del Estado de 2023.

El impuesto de "solidaridad" de las grandes fortunas

 

IMPUESTO DE SOLIDARIDAD

 

Este impuesto, junto con la rebaja del IVA a los productos de higiene femenina, es quizás la medida más representativa de la reforma acometida por el Ejecutivo. El impuesto dirigido a que contribuyan los que más tienen, tendrá carácter transitorio (2023-2024) y se aplicará a patrimonios que superen los tres millones de euros.

Este gravamen impondrá una carga fiscal en tres tramos. Para patrimonios entre tres y cinco millones de euros será de un 1,7%, para aquellos entre cinco y diez millones el impuesto ascenderá a un 2,1%, mientras que, para patrimonios superiores a los 10 millones, el gravamen alcanzará el 3,5%. Se estima que este impuesto afectará a unos 23.000 contribuyentes y permitirá recaudar hasta 1.500 millones de euros en favor de las arcas públicas. Con este gravamen se evitará además una doble imposición, ya que la cuota abonada a través del Impuesto sobre el Patrimonio será deducible en este nuevo gravamen.

Cambios en los tramos del IRPF

Con respecto al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), el gravamen aumenta un punto hasta el 27% para aquellas rentas que oscilen entre los 200.000 y los 300.000 euros anuales. Asimismo, para rentas superiores a los 300.000 euros, la variación porcentual es de dos puntos, situándose en un 28%.

El objetivo de la medida es conseguir reducir la brecha de tributación existente entre las rentas del trabajo y las rentas del capital. El Ejecutivo estima que el gravamen afectará a 17.814 contribuyentes y supondrá un aumento en la recaudación de 204 millones de euros hasta 2024. Por otro lado, para aquellas rentas situadas entre los 18.000 y los 21.000 euros anuales, aumentará la reducción por rendimientos del trabajo. Asimismo, subirá el mínimo de tributación desde los 14.000 hasta los 15.000 euros. Así pues, poniendo un ejemplo, un pensionista mayor de 65 años que percibe una pensión de 16.500 euros, se beneficiaría de un ahorro del 47% en el IRPF, lo que se traduce en que dejará de pagar a las arcas públicas casi 700 euros al año.

La reducción por rendimientos del trabajo y el aumento del mínimo de cotización beneficiará a casi la mitad de los trabajadores, ya que el salario mediano se sitúa justamente en los 21.000 euros. En términos generales, esto puede suponer un ahorro a la clase media y trabajadora de 1.881 euros. En cuanto a los autónomos, también se aplicará una rebaja adicional del 5% en el rendimiento neto y se elevará del 5% al 7% la reducción para gastos deducibles de difícil justificación. Estas medidas favorecerán a 1.534.140 autónomos y sumarán un ahorro de 184 millones de euros.

Modificaciones en el Impuesto sobre Sociedades

En lo tocante al Impuesto sobre sociedades, se beneficiará a las Pymes con una cifra de negocio inferior a un millón de euros, con una rebaja del tipo nominal del 25% al 23%. De esta bajada del tipo nominal se beneficiarán 407.384 empresas, lo que equivale a un ahorro de 292 millones de euros. Con respecto a las grandes empresas, se limitará a la mitad la posibilidad de compensar las pérdidas de las filiales en los grupos consolidados. Esta medida, que será de carácter temporal y afectará nada más que a 3.092 empresas (un 0,2% de declarantes de Sociedades), supondrá un aumento de la recaudación de 2.439 millones entre 2023 y 2024.

Rebaja del IVA a los productos de higiene femenina

El conocido como impuesto rosa también reduce del 10% al 4% el IVA de los productos de higiene femenina como: compresas, tampones, protege slips. La bajada del IVA afectará también a preservativos y anticonceptivos no medicinales. El impacto económico de la medida permitirá ahorrar a los consumidores hasta 24 millones de euros.