El comportamiento bochornos de Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), durante la celebración de la final del Mundial de Fútbol femenino ha manchado el hito conseguido por las jugadoras en la noche del domingo. Un beso sin consentimiento y una celebración obscena junto a parte de la Familia Real se suman a la larga lista de polémicas protagonizadas por el directivo. El verano pasado, el nuevo sueldo asignado por el desempeño de sus funciones también fue fruto de críticas por lo abultado de su cuantía.

La desorbitada cifra asciende hasta los 675.761,87 euros o, lo que es lo mismo, 1.851,40 euros al día. Además del salario, Rubiales percibe también 3.000 euros mensuales en materia de ayuda para la vivienda, entendiéndose que con su sueldo podría no ser suficiente. “El presidente de la RFEF es de los que menos ganan tanto cuantitativa como profesionalmente”, defendió en su momento el presidente de la RFEF. Sin embargo, desde la Federación no enfrentaron estos datos con otras asignaciones similares. “Sopesamos poner transparencias para comparar con otros CEOs, pero iban a ser muy reconocibles por todos”, justificaba.

Este incremento salarial, aprobado de forma unánime por la Asamblea General de la RFEF, fue posible gracias al carácter privado de la entidad. "Hay gente que me compara con el presidente del Gobierno, pero esto es una entidad privada del deporte”, apuntaba Rubiales. No obstante, esta explicación no evitó que el dirigente recibiese múltiples críticas por cobrar casi 700.000 euros anuales y una ayuda para la vivienda que asciende a los 36.000 euros anuales. “A veces comparamos peras con manzanas”, acusaba, refiriéndose a quien comparaba su salario con el de una figura pública.

Dinero de la federación gastado en orgías y otros cargo a las cuentas

Pocos meses después de aprobarse su nueva asignación salarial, el presidente de la Federación volvió a saltar a la actualidad por una acusación de desvío de dinero. El que fuera jefe de gabinete de la RFEF y familiar del propio Rubiales acusó a este de celebrar fiestas con “chicas jóvenes” en un lujoso chalé de Salobreña a cargo de los fondos de la entidad. A pesar de que el tío del dirigente aseguraba haber estado presente en las supuestas reuniones, la RFEF desmintió las acusaciones y aludió falta de pruebas.

Sobre cargos a las cuentas de la Federación que nada tienen que ver con actividades relacionadas con su labor como presidente, Rubiales también fue acusado de viajar a Nueva York por motivos personales y pagar los gastos con fondos de la entidad. Los fondos de la RFEF también sirvieron en su momento para pagar la mensualidad de un lujoso piso de 125 metros cuadrados en la calle Princesa (Madrid) en la que vivía en 2020 Rubiales, antes de cobrar la ayuda para vivienda. La mensualidad de la vivienda ascendía hasta los 3.100 euros al mes, cuantía similar a la que ahora recibe el dirigente para pagar su vivienda.

Caso Supercopa

Muchas son las polémicas que han salpicado a Rubiales, sin embargo, la más aireada fue la que le relacionaba con el ex futbolista Gerard Piqué. Ambos se vieron envueltos en una trama de supuesto cobro de comisiones millonarias por el traslado de la Supercopa de España a Arabia Saudí en 2019. Documentos y audios que fueron publicándose en la prensa evidenciaban estas actuaciones y la Fiscalía Anticorrupción terminó por abrir diligencias.

En aquel momento, la idea del presidente de la RFEF era acabar con el doble partido en pretemporada para darle más prestigio al torneo. Para ello, el central del Barcelona, a través de su empresa Kosmos Holding, diseñó una suerte de final four con los dos primeros clasificados de LaLiga y los finalistas de la Copa del Rey. De esta manera, los derechos televisivos de la competición aumentarían de manera considerable. En aquel momento, además, el salario de Rubiales estaba ligado a variables.

El presidente firmó el contrato con Arabia Saudí el 11 de septiembre de 2019, eligiendo el país árabe como sede de la Supercopa durante los próximos seis años. El ente federativo se aseguró 40 millones de euros libres de impuestos por cada temporada, disparando el salario variable del presidente de la Federación.

“A ver, Geri, mira. Yo lo voy a ver también esto con el Madrid. Yo creo que el Madrid me va a decir que no. Como me van a decir que no, esto nos viene de puta madre para justificarnos de cara al futuro y decimos que el Camp Nou es el estadio con más capacidad y, sobre todo, del campeón de Liga… Yo creo que legitimidad tenemos”. Este fue uno de los audios más famosos que vieron la luz y que, desde ese instante, se convirtieron en historia del fútbol español y levantaron muchas suspicacias.