El Impuesto de Patrimonio fue un tributo que estuvo suspendido durante algunos años en España. Concretamente, se suprimió a partir del 1 de enero de 2008 y tras la crisis económica, se recuperó en 2011. La idea inicial era que su presencia fuera, en principio, temporal hasta eliminarlo de nuevo en el año 2013, si bien, los planes cambiaron y tanto el Ejecutivo de Mariano Rajoy como el de Pedro Sánchez lo han mantenido y prorrogado sucesivamente. Además, en 2023 se pondría en marcha el 'Impuesto Temporal de Solidaridad de las Grandes Fortunas', el cual grava con una cuota adicional los patrimonios de las personas físicas de cuantía superior a los tres millones de euros. De esta manera, el objetivo de este nuevo motivo de pago a Hacienda se basó en que los patrimonios superiores a esta cifra no pudieran quedar exentos de pago por las bonificaciones aprobadas para el Impuesto de Patrimonio que implementaron algunos gobiernos regionales.

Tras la introducción del impuesto a la grandes fortunas, esas comunidades que contaban con bonificaciones, como Madrid o Andalucía, decidieron reactivar el Impuesto de Patrimonio ya que si existe el tributo autonómico --Patrimonio-- no se paga por el estatal --Grandes Fortunas--. Así, por ejemplo, Madrid pasó de no ingresar nada por Patrimonio en 2022, fruto de las bonificaciones, a recaudar 614 millones en 2023, al igual que Andalucía que pasó de 0 a más de 20 millones de euros. Dicho de otra manera, en el 2022 en Madrid hubo 23.486 declarantes de este impuesto que ninguno procedió a pagar, siendo ahora en el 2023 un total 10.659, entre los 24.533 declarantes, los que han procedido al abono, mientras que en Andalucía fueron 12.707 las personas que dejaron de contribuir a las arcas públicas mediante este tributo en el 2022, si bien, en el 2023 de los 12.013 ciudadanos que reunieron los requisitos para atender a este impuesto, solo 662 procedieron al pago. 

Estarán obligados a pagar el Impuesto de Patrimonio aquellas personas que cuenten unos bienes o derechos, cuyo valor, determinado de acuerdo con las normas reguladoras del impuesto, resulte superior a 2.000.000 de euros. En total, en España fueron hasta 228.575 las personas que declararon en este impuesto; sin embargo, al abono del tributo procedieron 192.291, lo que implica 7190 contribuyentes más que en el 2022. La comunidad que mayor cantidad de patrimonio declaró a través de este tributo en el 2023 fue Cataluña con 664.340.953 millones de euros y la que menos Extremadura con 53.526 euros. 

Según las estadísticas, los contribuyentes que declaran patrimonios superiores a los 30 millones de euros se han multiplicado casi por dos en la última década, pasando de 471 declarantes en 2013 a 865 en 2023, de acuerdo con los últimos datos de la Agencia Tributaria sobre la recaudación del Impuesto de Patrimonio. Desde el inicio de la recuperación económica en España tras la crisis de 2008, el número de 'ricos' con patrimonios declarados superiores a esta cantidad no ha hecho más que aumentar. En 2018 se produjo un ligero retroceso, hasta los 608, pero repuntó en 2019 hasta los 701, en 2020 llegó a los 724, en 2021 alcanzó los 831 y en 2022, los 852.

Atendiendo al total de contribuyentes que estaban en disposición de declarar el impuesto de patrimonio en 2023, el número se situó en 228.575, frente a los 230.365 de un año antes, por lo que se produjo un descenso de 1.790 declarantes de este tributo. Estos contribuyentes declararon un patrimonio total de 934.020 millones de euros, lo que situó la media en 4,07 millones, un 8,9% por encima respecto a 2022.

No obstante, el número de contribuyentes que declararon por este impuesto fue de 192.291 y lo pagaron, por un importe de 1.970 millones de euros, superior a los 1.250 millones ingresados un año antes, un 57,7% más, dada la reactivación del impuesto en varias comunidades autónomas.

Súmate a El Plural

Apoya nuestro trabajo. Navega sin publicidad. Entra a todos los contenidos.

hazte socio