España es la quinta potencia de la Unión Europea (por detrás de Alemania, Reino Unido, Francia e Italia), la cuarta del euro y, sin embargo, aparecemos en el furgón de cola con un suspenso rotundo en eficacia recaudatoria. ¿Cómo es posible que siendo uno de los países con mayor carga tributaria por habitante de la Unión sea uno de los que menos recauda? Tradicionalmente España aparece dentro de los países 'ineficaces' en recaudación, pro durante los cuatro años de Gobierno del PP no solamente no se ha mejorado, sino que hemos empeorado nota.

Brecha entre lo que se ingresa y lo que se gasta
La diferencia media entre lo que ingresan y lo que gastan los países de la UE es de dos puntos, incluidos estados donde la carga fiscal es menor. Sin embargo, en España la diferencia es de cinco puntos: 38,2% del producto Interior Bruto (PIB) en ingresos y 43,3% de gastos, mientras que la media de la UE es 45% de ingresos y 47,4% de gastos.

En 2012 el Gobierno del PP aprobó la mayor subida de impuestos de toda la democracia: IRPF, IVA, creación de nuevos impuestos energéticos y supresión de desgravaciones (como la de vivienda). Esa fue una de sus mayores y flagrantes incumplimientos del programa electoral. Crisis obligaba, explicaron, pero cuando se celebró la campaña electoral (2011) la crisis ya galopaba y prometieron bajar impuestos a sabiendas de que era imposible.
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, se ha presentado como el campeón contra el fraude fiscal, algo difícil de sostener cuando aprobó una amnistía fiscal con lo que presumió de recaudar mucho. A pesar de la subida de impuestos y de la amnistía fiscal, España sigue en el furgón de cola en recaudación, compartiendo espació con Rumanía, Bulgaria, Letonia o Polonia.

Causas: paro, economía sumergida y fraude
Para técnicos de Hacienda y expertos fiscales son varias las causas por las que España presenta unos niveles de recaudación "en absoluto acordes" con ser la cuarta potencia del euro. Contra algunas se puede actuar de forma contundente, por ejemplo aumento el número de inspectores de Hacienda, dado que la economía sumergida, el fraude y las desgravaciones fiscales con las que las Comunidades Autónomas compiten entre sí, son causas fundamentales.

Pero hay otro factor sistémico, y es el paro. España tiene una tasa de paro del 20%, el doble que la media comunitaria. En Francia es una catástrofe tener una tasa de desempleo del 10% mientras que en España se celebra que ahora esté en el 20%. Pero además el empleo que se ha creado es temporal y con bajos sueldos, por lo que se pueden poner los impuestos más altos del mundo, pero si la gente no trabaja o solo trabaja seis meses al año, es imposible que pague impuestos.