El economista y exministro de Industria, Comercio y Turismo Miguel Sebastián entró en directo en El Rojo Vivo el pasado 23 de marzo para analizar la situación actual de la economía española, vaticinado así que el índice de precios de consumo (IPC), el dato de inflación, probablemente descendería del 4% en marzo, respecto al 6% del febrero que experimentó una subida de un 0,9%.

El profesor Sebastián se mostró tajante y seguro de sí mismo con su pronóstico sobre el dato de inflación para el próximo mes ante la pregunta del presentador Antonio García Ferreras, llegando a lanzar el reto de que se raparía la cabeza si no acertaba. "El IPC de marzo, que sale el próximo día 30, va a ser muy bueno porque estamos comparando con un mes de marzo del año pasado con el inicio de la guerra que fue tremendo. Ahora está en el 6% y seguro va a bajar del 5%".

Ante la contestación, Ferreras preguntó sorprendido: "¿Que va a bajar del 5%?". "Seguro. Si no baja del 5%, yo me afeito la cabeza. Eso, seguro. Ya sé que no tengo mucho para afeitarme. Y probable que baje del 4%. No me afeitaría la cabeza pero le daría un 50% a que estuviera en el tres y pico", respondió el colaborador de La Sexta, mientras el propio periodista no pudo ocultar una sonrisa y añadió: "A este paso se va a dejar melena si acierta". "Ojalá. Y alguno se va a tomar la pastillita que recomendaba el señor Tamames", terminó diciendo Sebastián con una pequeña carcajada.

¿Tendrá que raparse Miguel Sebastián tras su predicción?

El exministro socialista de Industria socialista con José Luis Rodriguez Zapatero vaticinó que los nuevos datos actualizados sobre el IPC aliviarían el peso de la inflación en los bolsillos de los españoles. Una positiva predicción con respecto a nuestro país que algunos pusieron en duda. Sin embargo, este jueves, conocidos los datos de uno de los índices que ofrecen una visión más detallada sobre el estado de la economía de un país, podemos decir que Miguel Sebastián acertó.

La inflación ha caído al 3,3% en España según el dato adelantado (lo que se conoce en la jerga como el "flash") publicado este 30 de marzo, cuya revisión y datos detallados se revelarán el próximo 14 de abril. Que la inflación baje del 4% nos retrocede a agosto de 2021,

Los analistas de coyuntura también pronosticaron una fuerte caída en términos intertrimestrales que podría suponer casi una reducción a la mitad ante el 6% de febrero. Dos elementos hicieron pensar en la disminución del crecimiento: el precio medio de la electricidad ha bajado en marzo y el efecto escalón como lo denominan los expertos.

Cabe recordar, que marzo del pasado año fue el primer mes entero tras la invasión de Ucrania. Los precios subieron un 3% respecto al mes anterior, febrero, que ya había registrado un incremento mensual del IPC del 0,8%. Un aumento, el de marzo, inédito en los 20 años según los datos del Instituto Nacional de Estadística.

Por tener algunas referencias de los precios de aquel inflacionista mes de marzo de 2022, la electricidad ascendió en un solo mes un 28,5% y se colocó en 294 €/Kwh, según Red Eléctrica de España; el gasóleo se disparó un 18%, el aceite de girasol subió un 15% y la gasolina un 11%. Pero entre productos básicos, los huevos se incrementaron en un solo mes un 4,3%, el pescado un 3,1% y las patatas un 3%.

¿El final de la inflación?

Ante este dato inédito puede haber muchas reacciones, siendo una de ellas el pensar que la  inflación ha terminado. Según el propio Miguel Sebastián "la inflación no ha terminado, pero tampoco se está desbocando, como pretenden algunos". No obstante, con los últimos datos del IPC podemos tener una satisfacción controlada.

La inflación es una gran preocupación para sociedad española, según recogió el Eurobarómetro, la subida de los precios es la principal preocupación para el 54% de los ciudadanos del país, un porcentaje similar al de los ciudadanos europeos. Por lo tanto, es lógico que mucha gente se tome la bajada del IPC con euforia dando por acabada la crisis inflacionista.

El que fuera ministro de Industria, Turismo y Comercio, aseguraba en El Mundo, que "habrá ciertamente un rebote transitorio en el mes de abril, pero, cuando lleguen los meses de junio, julio y agosto que comparen con esos mismos meses de 2022, donde se alcanzó un pico, la caída de la inflación en verano va a ser significativa. Y esta vez no será transitoria". Aunque señaló que "la incertidumbre sobre el proceso inflacionista recae sobre los alimentos elaborados. Necesitamos más información sobre los márgenes de toda la cadena alimentaria".