El Ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha confirmado lo que ya se esperaba, las pensiones subirán el año que viene un 0,25%, lo mínimo previsto en la nueva reforma de las pensiones aprobada por el PP. Las pensiones ya no estarán vinculadas al Índice de Precios al Consumo, tal y como estableció en su día el Pacto de Toledo para que los pensionistas no perdieran poder adquisitivo (dinero). La reforma aún no está aprobada dado que entra esta semana en el Congreso de los Diputados para su debate, aunque es obvio que la mayoría absoluta del PP la sacará adelante sin problema. El ahorro, a cuenta de los pensionistas, se aplicará ya el 1 de enero próximo.

Más gasto porque hay más parados, menos cotizantes y más pensionistas
La economía no se reactiva y el paro sigue siendo dramático en España, con una tasa que no se apea del 26%. La previsión de Montoro para el 2014 es que la tasa de paro se sitúe en el 25,9% de la población activa, es decir, el 26%. Si no hay trabajo hay menos cotizantes a la Seguridad Social y con menos cotizantes y más pensionistas, en los Presupuestos Generales del Estado aumenta un 5,4% para este capítulo.

El Gobierno prevé un gasto en prestaciones contributivas de 112.102 millones de euros (un 5,4% más) mientras los ingresos descienden un 4,8% hasta los 119.702 millones. La partida de pensiones supone un 35,9% del total de los Presupuestos.

Desempleo y deuda
En los Presupuestos Generales del Estado presentados por Montoro se destinan a pagar las prestaciones por desempleo 29.727 millones de euros, un 10,1% más que en los de este año. Y eso a pesar de que uno de los recortazos aprobados por el PP ha sido bajar las prestaciones por desempleo al 60% y a partir del sexto mes al 50%.

En cuanto a la deuda que tenemos que pagar, a pesar de que ha bajado la prima de riesgo y por tanto los intereses que ha de pagar el Estado, tan solo se rebaja la partida en dos mil millones. La partida consignada 36.590 millones de euros frente a los 38.589 de este año.