Donald Trump ha pasado de decidir que los productos de Huaewei eran un riesgo para la seguridad, a considerarles simples competidores comerciales y levantarles el veto. Cuestiones de seguridad aparte (nunca se han llegado a mostrar pruebas del supuesto riesgo para la seguridad), la marca china de móviles es el principal vendedor de smartphones en España, por delante de su inmediato competidor, Samsung.
Tal vez por eso, en el día en que Huawei abre su tienda de bandera en la Gran Vía madrileña, la fila de curiosos y entusiastas de la empresa de tecnología casi daba la vuela a la manzana.
Y es que, según los propios ejecutivos de la empresa, tras un descenso inicial de ventas, las cifras se recuperaron en unos días, incluso antes de que EEUU levantase el veto. "Hemos vuelto a recuperar nuestras cuotas de mercado", declaró el mes pasado a la prensa Pablo Wang, director de la unidad de consumo de Huawei en España.
