La tasa de inflación interanual de Estados Unidos se situó el pasado mes de agosto en el 8,3%, dos décimas por debajo del 8,5% observado el pasado mes de julio. De esta forma, y desde el pico de la serie alcanzado en junio donde llegó al 9,1%, la escalada de los precios se moderó por segundo mes consecutivo.

Según los datos publicados este martes por la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos, la tasa mensual del índice de precios al consumo (IPC) de Estados Unidos subió al 0,1%, tras permanecer sin cambios en julio. 

El organismo ha explicado que los precios de la vivienda, los alimentos y la atención médica fueron los principales contribuyentes del incremento mensual. Por el contrario, los precios de la energía cayeron un 5%.

De esta forma, la inflación subyacente de Estados Unidos, que es el resultado de excluir del cálculo los precios de los alimentos y la energía, se situó en agosto en el 6,3%, cuatro décimas más.

Desde marzo, la Reserva Federal de Estados Unidos ha acometido una de las subidas más aceleradas de los tipos de interés desde hace décadas. En apenas cuatro meses (entre marzo y julio), el banco central ha subido el precio del dinero en 2,25 puntos porcentuales, hasta su mayor nivel desde diciembre de 2018.