Pablo Iglesias ha defendido este viernes una renta mínima europea en su primera entrevista al diario económico Financial Times. Se trata de una propuesta de la Vicepresidencia de Derechos Sociales y Agenda 2030, secundada por los países vecinos del sur de Europa, Portugal e Italia, que el vicepresidente segundo del Gobierno ha explicado en el medio económico.
Tal y como ha avanzado, los tres países del sur se han unido y estarían buscando apoyos en otros gobiernos europeos para diseñar una prestación adaptada a cada país concreto. Además, la ayuda sería complementaria con los diferentes sistemas de renta, incluido el ingreso mínimo vital que está ultimando el Ministerio de Seguridad Social español y que aprobará en las próximas semanas.
Esta renta mínima europea tendría como objetivo alcanzar unos estándares de renta mínimos en todos los países de la zona euro. Para ello, se adaptaría según diferentes indicadores económicos como el PIB, el IPC o la tasa de paro, según fuentes del Gobierno, y sería compatible con el reaseguro europeo de desempleo o con el sistema de garantía infantil y juvenil.
La iniciativa aún se encuentra en fase de estudio por parte de España, Portugal e Italia y será presentada ante el resto de socios. Por ese motivo, por el momento no avanzan detalles sobre su financiación y presupuesto.
Escudo social europeo
Por otro lado, Pablo Iglesias publica también este viernes un artículo en La Vanguardia, firmado conjuntamente con la ministra de Trabajo de Italia, Nunzia Catalfo, y la ministra de Trabajo, Solidaridad y Seguridad Social de Portugal, Ana Mendes, donde ahonda en este ingreso mínimo europeo.
Los responsables sociales defienden que "es el momento de que la Unión Europea mire al futuro y avance en el desarrollo de un Plan de Acción para implementar el Pilar Europeo de Derechos Sociales poniendo en marcha un escudo social europeo que incluya un ingreso mínimo de carácter europeo".
En el diario nacional, el vicepresidente segundo ha explicado que "la persistencia de la pobreza y el desempleo en Europa y su previsible agravamiento debido a la pandemia de la Covid requieren soluciones globales e integradas más allá de los marcos nacionales". Asimismo, pide una “respuesta europea coordinada” para evitar una crisis económica y social como la derivada de la crisis de 2008.
