El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana se ha comprometido este viernes ante las principales patronales del sector del transporte de mercancías por carretera a presentar la próxima semana un paquete de medidas que solucione los problemas por los que atraviesa el sector. En la reunión mantenida, que ha tenido una duración de tres horas y media y ha sido la primera desde que la patronal anunciara un cierre para los días 20, 21 y 22 de diciembre, ambos actores han conversado con el objetivo de evitar la paralización de la actividad en fechas claves y un posible colaso del país. 

Por su parte, el Comité Nacional del Transporte por Carretera, que es el organismo que ha convocado el paro, afirma que las conversaciones continuarán, toda vez se hayan recibido estas propuestas. Según Ramón Valdivia, director general de la Asociación del Transporte Internacional por Carretera (ASTIC): "Nos mostramos esperanzados de que la reunión de más de 3 horas que hemos mantenido esta mañana marque el inicio de unas negociaciones fructíferas". 

Por su parte, desde el ministerio, explican que las reivindicaciones de la patronal tiene cuatro vertientes y que ya se está trabajando en todas ellas con el fin de evitar cualquier impacto que este posible cierre del transporte podría tener sobre los ciudadanos. De hecho, Raquel Sánchez, ministra de Transportes, incide en que además existe un conflicto entre camioneros y cargadores a pesar de que la ley especifica que los camioneros no tienen que hacer la carga y descarga

No obstante, entre las empresas de transportes, por mera competitividad en el sector, para conseguir un contrato algunas empresas establecen que los camioneros realizarán la carga y descarga, una actividad física, que además, dificulta la entrada de las mujeres al sector.

Otro de los problemas se relaciona directamente con el precio de los carburantes. A pesar de que los transportistas pueden establecer una cláusula de revisión de precios, suelen renunciar a ella para ganar una ventaja competitiva, por lo que acaban asumiendo la gran subida del diésel. A este respecto el Gobierno y está revisando los precios, pero solo en los contratos en los que está habilitado para hacerlo: licitaciones públicas. Por ejemplo en el caso de Adif, el Gobierno ha intervenido paradesbloquear la paralización de las obras en vías de tren, ya que las constructoras no podían asumir por el elevado precio de las materias primas.

En tercer lugar, las patronales reclaman, al igual que los sindicatos del sector, más áreas de descanso en las carreteras. Sin embargo, este escenario se complica para el Gobierno ya que hay un déficit respecto a la conservación de las carreteras. Es decir, en este punto el ministerio se encuentra en números rojos a la espera de que la introducción de los peajes en autovías pueda ofrecerles un respiro, en este contexto. 

Por último, la cuarta vertiende responde a que los camioneros se vean afectados por los futuros peajes. Según el Gobierno, se cifra en cifra en 355 millones de euros el importe que ya les ha ahorrado con el levantamiento de peajes en más de 1.000 kilómetros de autopistas en los últimos tres años. Por lo que la capacidad de consenso en este punto se complica. 

Desde otros frentes denuncian que el sector está atomizado, es decir, que cuenta con muchos autónomos y pymes sin capacidad de negociación o diálogo en este mesa y por ende, sin hacer visible una gran parte de los problemas que padece el sector así como la aportación de soluciones a los mismos problemas.