La aparente e inminente opa sobre Talgo ha revolucionado el mercado. A mediodía del jueves, una información revelada por El Confidencial aseguraba que la oferta pública de adquisición (opa) de acciones de Magyar Vagon, un grupo húngaro, sobre el 100% de Talgo estaba cerrada. Una operación que, según el medio, se iba a anunciar en las horas siguientes. Un anuncio que, al menos hasta primera hora de la mañana de este viernes, no se ha realizado de forma oficial. Lo único que ha conseguido es disparar la acción de Talgo, casi un 10%, y provocar que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el regulador del parqué nacional, haya decidido suspender la cotización de la compañía. Una suspensión que se mantiene en la mañana del viernes a la espera de conocerse más información sobre la operación.

A pesar del revuelo inicial provocado en los mercados tras la publicación del inminente acuerdo nada parece haber cambiado en las últimas horas. La CNMV suspendió la cotización alrededor de las 15:52 horas de la tarde, tal y como consta en el documento publicado por el regulador para informar de la suspensión temporal de la cotización bursátil de Talgo en el Mercado Continuo, y así se mantiene la acción de la compañía, al menos hasta el momento. La CNMV explica que su decisión de suspender la cotización corresponde al hecho de que hay “retención de información relevante”, presumiblemente de la opa, a la espera de ser difundida por las partes responsables de la operación, en este caso el grupo húngaro Magyar Vagon y la empresa española Talgo. Por el momento, ni una ni otra ha hecho comentarios oficiales sobre la operación.

“La Comisión Nacional del Mercado de Valores, ha adoptado con fecha 08 de febrero de 2024 el siguiente acuerdo ‘Suspender cautelarmente, con efectos inmediatos, al amparo del artículo 64 de la Ley 6/2023, de 17 de marzo, de los Mercados de Valores y de los Servicios de Inversión, la negociación en las Bolsas de Valores y en el Sistema de Interconexión Bursátil de las acciones de TALGO S.A., y otros valores que den derecho a su suscripción, adquisición o venta, mientras es difundida una información relevante sobre la citada entidad’”, reza literalmente la información remitida públicamente por el supervisor nacional.  

CNMV: "Retención de información relevante"

En otras palabras, la CNMV no suspendió la cotización por el repunte de las acciones de Talgo, alrededor de un 10% en menos de dos horas en plena mediodía, sino por asegurar que hay una “información relevante” retenida sobre la empresa. Y así la mantendrá hasta que se produzca una información, por alguna de las partes, que aclare el futuro de la opa. Los títulos de Talgo se dispararon en el Mercado Continuo nada más conocerse el que se anunciaba como acuerdo inminente sobre la opa del grupo húngaro Magyar Vagon y que, finalmente, no sucedió en la tarde del jueves. Las acciones de la compañía cerraron la sesión a las 16 horas de la tarde y no a las 17:30 horas, como viene siendo habitual, precisamente por la suspensión de cotización de la CNMV. Así, terminaron la sesión a un precio de 4,78 euros por título, muy por encima de los 4,41 euros a los que se vendía la acción de Talgo antes de publicarse la información que despertó el revuelo de los inversores, pero por debajo del nivel de los 5 euros.

La evolución de la acción de Talgo en las horas siguientes a la publicación de dicha información es especialmente importante ya que el precio de las acciones de la compañía marca el precio final de la opa. La oferta pública de adquisición de acciones (opa) que el grupo húngaro Magyar Vagon ha lanzado sobre el total de la compañía lleva consigo un precio de compra de 5 euros por acción, todavía por encima de los niveles de cotización de la compañía al cierre del mercado de la sesión anterior, en su caso a las 16 horas por la suspensión del mercado.

DJJ ya confirmó su interés por Talgo en noviembre

Los rumores de la opa total del grupo húngaro Magyar Vagon sobre Talgo van en línea de lo que ha ocurrido en los últimos meses, incluso años, con el futuro del fabricante de trenes nacional. Ya a mediados de noviembre, el fabricante de trenes confirmó públicamente el interés manifestado por este grupo, concretamente de su empresa DJJ, para adquirir el 100% de la compañía española. Un acuerdo que se habría pactado inicialmente a un precio de 5 euros por acción y que disparó la acción en el Palacio de la Bolsa madrileño en su momento, el 13 de noviembre, más de lo que ha ocurrido este jueves en el Mercado Continuo con la cotización de la compañía.

Talgo y el grupo húngaro llegaron a un primer acuerdo a mediados de noviembre para ejercer una opa total sobre el fabricante de trenes nacional a 5 euros por acción. Un precio muy superior al nivel de cotización de los títulos en ese momento, en los 3,90 euros. En ese momento la acción se disparó hasta los 4,40 euros, un nivel que ha superado ahora, y la CNMV optó también por suspender la cotización. Pero la suspendió durante unas horas, a la espera de conocer mayor información sobre la operación. La diferencia ahora es que las acciones de Talgo llevan suspendidas desde las 16 horas del jueves y no van a volver al mercado hasta que no se produzca una información relevante por parte de alguna de las partes protagonistas del acuerdo, previsiblemente Talgo.

La compra de Talgo a un precio de 5 euros por título supondría valorar la empresa alrededor de los 617 millones de euros, tal y como constaba en el preacuerdo formalizado en noviembre y a la espera de conocer el resultado final de la negociación de la opa. Magyar Vagon, el conglomerado húngaro que quiere comprar Talgo es propiedad del empresario András Tombor, y entre sus activos cuenta con otra empresa fabricante de trenes denominada DJJ. Sin embargo, no es la única empresa interesada en Talgo, sino que en los últimos meses también ha sonado el nombre de la empresa vasca CAF como posible comprador del fabricante de trenes. Sea como sea, el fabricante de trenes podría considerarse como una empresa estratégica a nivel nacional, en base a la seguridad de las conexiones y comunicaciones del transporte, por lo que previsiblemente el Estado tenga que dar su visto bueno o, al menos su opinión, sobre una opa que supondría pasar la totalidad de la compañía española al grupo húngaro.